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El joven que dijo haber matado a Guadalupe Lucero fue internado en un hospital psiquiátrico

El hombre que fue diagnosticado con una “descompensación psicótica” ya se había autoincrimando en otros casos. Anoche se hicieron allanamientos en su casa. Hoy siguen los operativos en San Luis.


Después de que un joven se presentara en una comisaría y confesara haber asesinado a Guadalupe Lucero, la nena de cinco años que desapareció en junio de 2021, fue internado en un hospital psiquiátrico.

Sergio Andrés Ponce, hermano de la exsecretaria de la Juventud del Gobierno provincial y actual concejal del bloque Fuerza San Luis, Julieta Ponce, tiene una patología psiquiátrica y se autoincriminó por el crimen de la menor, pero la Justicia consideró que esa afección, en principio, no invalida su relato.

Fuentes policiales indicaron que en las últimas horas el joven fue diagnosticado con una “descompensación psicótica” y quedó internado en un hospital psiquiátrico.

En medio de un gran despliegue policial, anoche los investigadores allanaron la casa de Ponce y pudieron entrevistarse con su mamá, quien confirmó que el joven es esquizofrénico y se encuentra bajo tratamiento.

Durante el procedimiento hecho en el barrio Los Aromos, no arrojó resultados positivos y solo secuestraron el CPU de una computadora y las autoridades se retiraron a primera hora esta mañana, sin dejar consigna policial en el lugar.

Si bien la enfermedad del joven no invalida, en principio, su declaración, lo cierto es que no es la primera vez que se autoincrimina en algún hecho policial, y hasta meses atrás se declaró culpable de la propagación del virus del COVID.

Las versiones que le dio a la policía sobre el supuesto asesinato de Guadalupe

El presunto homicida dio dos versiones a la policía sobre el trágico final de Guadalupe. En una primera declaración y quebrado por el llanto, sostuvo que le dio burundanga a la víctima, la quemó y después se deshizo de las cenizas por el inodoro del baño de su casa.

Pero un rato más tarde, Ponce cambió su relato y dijo que se cruzó por casualidad con la nena en el Barrio 544 Viviendas, la agarró de la mano y se tomó con ella un colectivo hasta Potrero de los Funes. Una vez allí, se dirigió hasta el Valle de Pidra donde, finalmente, la estranguló y la enterró.

Ayer se llevaron a cabo diferentes operativos en el lugar y hoy seguirán con los mismo para seguir avanzando con la investigación y dar por descartada esta hipótesis.