La interventora del Inadi quedó sobreseída en una causa que se inició cuando fue denunciada supuestamente por intentar darle un puesto en su repartición a la empleada doméstica que trabajaba en su casa.
La titular del Instituto contra la Discriminación (INADI), Victoria Donda, fue sobreseída en la causa en la que había sido acusada por una exempleada doméstica de ofrecerle empleo en ese organismo o un plan social a cambio de evitar sus reclamos por irregularidades en la relación laboral.
El fallo firmado por el juez Sebastián Casanello reconoce que “existieron conversaciones privadas en el marco de las cuales Donda habría formulado un ofrecimiento impropio” a su exempleada, Arminda Banda Oxa.
“Sin embargo, las medidas de prueba efectuadas corroboraron que, tras esos diálogos, no existió una resolución o una orden emanada de la funcionaria que dispusiera hacer efectivo tal ofrecimiento, ya sea mediante una contratación o el otorgamiento de un plan social”, explicó el juez.
Casanello recabó como información que los reclamos laborales de Banda Oxa contra Donda no encontraron solución en la etapa previa al juicio laboral, por lo que el inicio de un reclamo en tribunales aparece como inminente.
Banda Oxa le reclama a Donda $662.987 en concepto de salarios mal liquidados, cargas sociales no pagadas, vacaciones, aguinaldos y otros rubros. “Lo resuelto en el marco de la presente causa, de ningún modo obsta a que, de corresponder, se activen los procedimientos a los que hace referencia la Ley de Ética Pública”, puntualizó el fallo.
Tras conocerse la decisión del juez Casanello, el abogado de la empleada doméstica, Fernando Zarabozo, consideró que el sobreseimiento a Donda confirma la “decepción que tiene la gente con la Justicia”. “Me da mucha tristeza por la gente que es muy explotada y se aprovechan de su vulnerabilidad. Arminda (la empleada) era de nacionalidad boliviana y eso hace que se acentúe su desconocimiento en los derechos”, indicó el letrado en diálogo con Cadena 3.
“Hay una Justicia para la gente de a pie, que cree en las instituciones y en hacer las cosas bien, y otra que es la que juzga a los millonarios, a las personas poderosas y que esgrimen justificaciones y logran que los jueces muchas veces les den la razón”, concluyó.
