La escritora admitió que no debió decir que el ofrecimiento que le hizo la Provincia de Buenos Aires para vacunarse fue «por debajo de la mesa». El Gobernador afirmó que es «mentira y un ataque absolutamente canalla».
«Me autocritico fuertemente. No debí decir ‘por debajo de la mesa'», afirmó la ensayista tras declarar ante la Justicia Federal que Soledad Quereilhac, esposa del gobernador Axel Kicillof, le había ofrecido la vacuna a través de su editor, Carlos Díaz.
Sarlo sostuvo: «Que me disculpe la Provincia por utilizar mal la expresión, no debería haber dicho por debajo de la mesa».
Igualmente, ratificó su critica respecto a que si se trataba de una campaña pública para que personalidades de la cultura dieran el ejemplo ante la desconfianza que en ese momento despertaba la vacuna rusa Sputnik V, debía ser informada formalmente por funcionarios de Gobierno, con mayores precisiones que las que se le proporcionaron.
«Que yo sepa la mujer de Kicillof no es funcionaria», aseguró, y en el mismo sentido, agregó: «A mí no me escribe ningún responsable de ninguna institución, me escribe mi editor».
«Si era una campaña pública, a mí no me llegó con la forma que tiene que tener una campaña pública», sostuvo, y resaltó que en el mail no se precisaba quienes iban a dirigir ese operativo de vacunación ni quienes iban a integrar ese grupo de personalidades relevantes.
Por otra parte, dijo que ella vive en la Ciudad de Buenos Aires y se preguntó «por qué la provincia estaba reclutando a intelectuales porteños».
«Mantengo mi crítica porque en ese mail que recibí no había ningún dato», enfatizó, y añadió que el contenido de ese mail «parecía más propio de un centro de estudiantes que a un aparato burocrático del Estado«.
Kicillof enojado
El gobernador de Buenos Aires afirmó que es «mentira y un ataque absolutamente canalla» decir que el ofrecimiento de la vacuna a Sarlo en el marco de una campaña de concientización fue algo irregular.
«Es mentira y un ataque absolutamente canalla contra mi esposa y mi familia», resaltó Kicillof.
El gobernador aseguró que luego de la denuncia de la ex diputada nacional Elisa Carrió del 22 de diciembre por envenenamiento pensó en hacer una campaña con 100 personajes influyentes para alentar a la ciudadanía a vacunarse.
«Más pública, más arriba de la mesa no se me ocurre porque la idea era que se vacunaran y se sacaron una foto para terminar con ese tremendo trabajo que se estaba haciendo para desprestigiar la vacuna», enfatizó en declaraciones al canal TN.
Kicillof explicó que el ofrecimiento a Sarlo tuvo que ver con una idea que tuvieron en la Provincia de invitarla para alentar a la población a darse la vacuna, y sobre ello insistió: «Qué campaña por debajo de la mesa puede haber si manda un mail su editor».