Ante la suba de casos en CABA y Provincia de Buenos Aires, se evalúa volver a fase 3 en algunos municipios, pero se negociará no afectar la actividad industrial y comercial ni tampoco la presencialidad en las escuelas.
La segunda ola de coronavirus con nuevas cepas más contagiosas preocupa y enciende alarmas en todo el país. Es por eso que el presidente Alberto Fernández busca mantener una reunión con el gobernador de la provincia de Buenos Aires y el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta para acordar una serie de medidas para lograr controlar el aumento de casos que preocupó en los últimos días.
Ayer, el Presidente y el gobernador bonaerense conversaron telefónicamente y analizaron la suba de los casos y en avanzar en consensuar “restricciones adicionales” a las ya anunciadas que podrían devenir en una “nueva fase 3”.
Esta etapa implica bajar el nivel de circulación de personas sin afectar la actividad industrial y comercial ni tampoco la presencialidad en las escuelas.
La Provincia, ya presentó una serie de medidas restrictivas de cara al fin de semana largo por la Semana Santa.
Al mismo tiempo, Fernández también habló con Larreta para acordar una reunión en Casa Rosada para analizar la situación sanitaria ante el alza sostenida de los casos de coronavirus, pero por ahora ese encuentro deberá esperar: el funcionario porteño se mostró dispuesto al diálogo pero habría puesto una serie de condiciones., ya que considera que antes de producirse el encuentro deberían discutirse cuáles son los objetivos a tratar para que la reunión no quede solo en una foto.
Se espera que en los próximos días se reúnan los equipos técnicos de Nación y ciudad de Buenos Aires para ponerse de acuerdo sobre los cuestiones a tratar en el encuentro que luego llevarán adelante ambas gestiones.
De igual modo, cualquier medida que adopten y que implique mayores restricciones, aseguran desde las tres administraciones, deberá afectar lo menos posible en la actividad productiva. No habrá una cuarentena estricta como conocimos con la llegada de la pandemia al país en marzo del 2020.
Por su parte, la ministra de Salud de la Nación, Carla Vizzotti pidió no hablar de “restricciones”, sino “de una nueva etapa en la que tenemos un año de experiencia y en la que sabemos que hay cosas que han demostrado tener impacto para detener la transmisión”. “Las medidas que vayamos a tomar van a depender de cómo vayan estos días”, agregó.
Al mismo tiempo aclaró que “las actividades productivas, comerciales y la escuela no son fuente de contagios, sino todo lo social”.
