Así lo decidió el juez Julián Ercolini por la compra irregular del edificio de la Procuración.
La exjefa de los fiscales Alejandra Gils Carbó irá a juicio oral y público por la compra de un edificio donde funciona la Procuración General de la Nación ante sospechas de favorecer a una determinada empresa y un supuesto pago de sobreprecios.
Así lo decidió el juez federal Julián Ercolini, al dar por cerrada la investigación y remitir el expediente a un Tribunal Oral para que se la juzgue por el delito de negociaciones incompatibles con la función pública por la compra de un edificio en la calle Perón al 600, donde actualmente funciona la Procuración General de la Nación, e intervino en la operación la inmobiliaria Jaureguiberry y Asociados, actuando de intermediario Juan Carlos Thill, al que se le habría pagado una comisión de $3 millones.
La exjefa de los fiscales está señalada por la compra del edificio en $43 millones y de comisiones. De esta manera, la exfuncionaria se convirtió en la primera exprocuradora general de la Nación en ir a juicio por corrupción.
La decisión del juez fue luego del pedido del fiscal a cargo de la investigación, Eduardo Taiano, y cuando la acusación contra Gils Carbó, quien renunció a su cargo acorralada por el macrismo que la tildaba de “militante” kirchnerista, fue confirmada por la Cámara Federal porteña.
Incluso, Gils Carbó planteó la recusación de Ercolini, que fue desestimada recientemente por la Cámara Federal y, de esta forma, habilitó a ese último a enviarla a juicio para ser juzgada por ese hecho.
Para la Justicia la compra del edificio había sido digitada previamente y se montó todo un armado para darle apariencia de legalidad.
También irán a juicio Bellingi, Fischer, Jaureguiberry y Thill por el delito de negociaciones incompatibles con la función pública.