Un tribunal de Los Ángeles determinó que el patrimonio de la estrella del pop deberá seguir siendo conservado por Jamie Spears. “Solo quiero que me devuelvan mi vida. Pasaron 13 años y ya es suficiente”, había dicho la artista a la Justicia.
La Justicia de Los Ángeles denegó una petición para destituir al padre de Britney Spears como tutor del patrimonio de la famosa cantante estadounidenses.
La decisión judicial se conoció apenas una semana después de que se produjera la vista de la petición formulada por Spears, cuya fortuna está calculada en unos 60 millones de dólares. La artista había pedido poner fin a la tutela legal por la que su padre controla su vida desde hace 13 años, al considerarla “abusiva” y “absurda”. “Solo quiero que me devuelvan mi vida. Pasaron 13 años y ya es suficiente”, había pedido la mujer de 39 años ante la Justicia.
En su fallo, el Tribunal determinó que el patrimonio de la estrella del pop debe seguir siendo controlado y conservado en parte por su padre Jamie Spears.
Documentos judiciales confidenciales publicados la semana pasada por el New York Times afirmaron que Spears le dijo a un investigador de la Corte que la tutela se había “convertido en una herramienta opresiva y controladora contra ella desde 2016”.
Según el informe citado por el diario, la artista quería que la tutela terminara lo antes posible y que estaba cansada que se aprovecharan de ella. La revelación de que la custodia le impedía sacarse su DIU, pese a que la cantante quiere tener el control de su medicación anticonceptiva. generó enojo entre sus fanáticos y grupos de derechos reproductivos.
La controversia en torno al caso legal de Britney Spears cobró nuevo impulso tras el lanzamiento en febrero del documental “Framing Britney Spears”, que cuenta el proceso hacia su colapso emocional y el nombramiento de su padre como tutor.
Tras su divorcio de Kevin Federline en 2006 y la pérdida de la custodia de sus hijos al año siguiente, paparazzis la fotografiaron descalza en una gasolinera con la cabeza rapada.
Bajo la tutela de su padre, Britney Spears rápidamente volvió a actuar. Lanzó tres álbumes, apareció en varios programas de televisión e incluso aceptó una residencia en Las Vegas. Pero en enero de 2019 anunció abruptamente que suspendería sus actuaciones hasta nuevo aviso.