Eran integrantes de dos bandas que se dedicaban a la captación de datos por homebanking y pedían créditos preaprobados.
Según informó el Ministerio Público Fiscal de la provincia de Córdoba, durante junio, dicataron la prisión preventiva a 16 personas que formaban parte de dos bandas que hacían estafas virtuales.
La Fiscalía de Cibercrimen, a cargo de Franco Pilnik comprobó que se dedicaban a la captación de datos de homebanking y solicitud de créditos preaprobados entre otras maniobras. Se los acusa de asociación ilícita y estafas reiteradas, y permanecen alojados en el penal de Bouwer.
Se trata de dos organizaciones delictivas compuestas por numerosas personas. Algunos llevaban a cabo las maniobras de engaño para obtener las claves de banca virtual de las víctimas, y otros, prestaban sus cuentas bancarias para canalizar el dinero producto de los fraudes.
Las estafas bancarias se encuentran entre los delitos que más crecieron durante el último año tras el vuelco masivo de usuarios a canales digitales durante la pandemia.
Según un informe de la Unidad Fiscal Especializada en Ciberdelincuencia (Ufeci) las denuncias por fraude y estafa en cuentas bancarias tuvieron un incremento de casi el 3.000% durante el 2020: en el 2019 se habían denunciado 22 casos y en el año pasado esa cifra ascendió a 641.
Ciberfraudes, por Catalina Neme, subdirectora Ejecutiva del OCEDIC -Desde el OCEDIC –Observatorio de Cibercrimen y Evidencia Digital en Investigaciones Criminales- del Departamento de Derecho Penal de la Universidad Austral
“El avance tecnológico ha hecho imprescindible que los códigos penales de la gran mayoría de los países actualicen e incorporen nuevos tipos penales y, a su vez, ajusten algunos delitos que, si bien ya existían, necesitaban de ciertos cambios para que las conductas llevadas a cabo a través de modernas técnicas informáticas quedaran alcanzadas.
A su vez, la pandemia generada por el virus COVID-19 ha llevado a la hiperconectividad de las personas, en función de que todas las actividades se llevaron al fuero virtual. Relacionarse, trabajar y estudiar lleva a que estén todo el día en Internet. Esto ha generado un espacio y oportunidad para quienes cometen conductas delictivas.
Uno de los delitos que mayor incremento ha tenido durante el último año, y específicamente en los últimos meses, es el fraude informático. Se trata de conductas que se llevan a cabo engañando al usuario a través de diferentes técnicas de manipulación, logrando obtener así los datos de acceso relativos al usuario de Homebanking de la víctima. Una vez que el delincuente obtuvo esta información, ingresa al homebanking del usuario y realiza diferentes maniobras, tales como:
– Solicitud y acreditación en caja de ahorros de un préstamo personal, suma que luego transfiere a la cuenta de un tercero.
– Venta de dólares estadounidenses, los que son acreditados en la cuenta en pesos, y luego transferidos a la cuenta de un tercero.
En todos los casos, el delincuente logra ingresar al usuario de homebanking porque de alguna manera, ya sea un llamado telefónico haciéndose pasar por personal del Banco, una compraventa apócfrica mediante la cual se hacen de los datos de las cuentas del comprador, un correo electrónico simulando ser una entidad bancaria –entre tantas otras modalides-; se hace de datos de víctima con los que logra acceder al homebaking. Esta última modalidad relacionada con los mails aprócrifos, refiriendo por ejemplo que se ha bloqueado la clave del usuario y que tiene 24 horas para restablecerla ingresando al link adjunto, es la que más se advirtió en los últimos días.
De información obtenida de la Unidad Fiscal Especializada en Delitos y Contravenciones Informáticas del MPF CABA –UFEDyCI-, a cargo de la Fiscal Daniela Dupuy, se pudo determinar que en el último trimestre ingresaron 234 denunciadas de este tipo a la Unidad, número que crece día a día exponencialmente.
No se trata de maniobras muy complejas desde el punto de vista informático, sino que lo que se ve es falta de educación de las personas en cuanto a brindar datos de carácter personal. Ello, sin perjuicio de las medidas y políticas de seguridad que, en su caso, corresponden a las entidades bancarias.
Muchas veces los usuarios tienen problemas con su HomeBanking, y recurren a las redes sociales para solucionarlo, por tratarse de la vía más directa e, inlcuso, a veces pensando en el “escrache” público” a la entidad para una pronta solución. En muchos casos, las cuentas de las redes en las que hacen el reclamo son verdaderas, pero los delincuentes toman de allí la información y los datos de ese usuario, y lo contactan directamente haciéndose pasar por el Banco. En otros, directamente efectúan este escrache en una cuenta apócrifa de la entidad, manejada por delincuentes.
Lo que sí se ha detectado en el 90% de los casos es que la conversación migra a la plataforma de mensajería Whatsapp, donde el autor se contacta directamente con el usuario. Además, se han detectado, en menor proporción, fraudes que involucran billeteras virtuales de los usuarios, conductas que salen de la órbita de usuarios de homebanking tradicionales. Se trata de billeteras que tiene menos seguridad en las credenciales, y por ello resultan más fáciles de vulnerar por los delincuentes.
Todas estas conductas se encuentran sancionadas en el Código Penal de la Nación en las previsiones del art. 173 inc. 16. “Sin perjuicio de la disposición general del artículo precedente, se considerarán casos especiales de defraudación y sufrirán la pena que él establece: … 16. El que defraudare a otro mediante cualquier técnica de manipulación informática que altere el normal funcionamiento de un sistema informático o la transmisión de datos. (Inciso incorporado por art. 9° de la Ley N° 26.388, B.O. 25/6/2008)”.
De información obtenida de la Unidad Fiscal Especializada en Delitos y Contravenciones Informáticas del MPF CABA –UFEDyCI-, a cargo de la Fiscal Daniela Dupuy, se pudo determinar que en el último trimestre ingresaron 234 denunciadas de este tipo a la Unidad, número que crece día a día exponencialmente.
Sin embargo, la mejor defensa frente a estas estafas es la prevención a través de la concientización de los ciudadanos. Que estos casos tomen notoriedad en los medios y poder visibilizar esta problemática es un gran paso para el cuidado de los ciudadanos”.