El cura abusaba de niños y adolescentes de entre 10 y 14 años cuando se desempeñaba como preceptor en el Seminario Arquidiocesano Nuestra Señora del Cenáculo de Paraná, entre 1985 y 1993.
La Cámara Federal de Casación Penal de Paraná da a conocer su decisión sobre el pedido de apelación del cura Justo José Ilarraz, condenado a 25 años de prisión efectiva por abuso y corrupción de niños y adolescentes de entre 10 y 14 años.
Los abusos fueron perpetrados mientras Ilarraz se desempeñaba como preceptor en el Seminario Arquidiocesano Nuestra Señora del Cenáculo de Paraná, entre 1985 y 1993.
En 2018, los jueces Alicia Vivian, Carolina Castagno y Gustavo Pimentel lo condenaron por unanimidad a la pena máxima que establecía el Código Penal de ese entonces.
El fallo fue apelado por el abogado defensor del cura, Jorge Muñoz, quien pidió además que se conforme un nuevo tribunal para que vuelva a emitir dictamen y que Ilarraz sea puesto inmediatamente en libertad.
La prisión preventiva para Ilarraz, bajo la modalidad de arresto domiciliario, la cumple en un departamento ubicado en calle Corrientes de Paraná, a menos de 10 metros de una escuela secundaria y de una agencia de viajes de egresados y quinceañeras.