Este plan contempla un programa elaborado en base a aspectos como la evolución de la tasa de femicidios de los últimos años.
El presidente Mauricio Macri presentó el Plan Nacional de Seguridad para la reducción de femicidios, el cual fue impulsado por el Ministerio de Seguridad que encabeza la ministra Patricia Bullrich.
El proyecto contempla un programa elaborado en base a aspectos como la evolución de la tasa de femicidios de los últimos años; diagnósticos sobre causas e incidencias respecto al total de homicidios; un plan de acción con un enfoque en las causas mediatas y que contemple ejes como la prevención, la protección de denunciantes y la investigación criminal, entre otras cuestiones.
Dentro del Plan se proponen cambios normativos: “Vamos a transformar las denuncias por violencia de género en denuncias de instancia pública, como lo es, por ejemplo el abuso infantil. Hoy enviamos un proyecto de ley al Congreso para que esto suceda”, anunció Macri.
El Plan 20-23 tiene 22 puntos, pero se va a actuar en cuatro grandes líneas:
* Investigación automática desde la primera denuncia: se buscará que las mujeres ya no tengan que denunciar dos veces (primero en la comisaría, después en la justicia) para que ésta última esté obligada a investigar el caso.
* Cualquiera podrá denunciar: ya no será sólo la víctima la que pueda denunciar. También podrán hacerlo un abuelo preocupado por la relación de su nieta con el novio o una mujer que conoce la violencia contra una amiga suya. Se transformarán las denuncias por violencia de género en denuncias de “instancia pública”, como ya son las de abuso infantil. El presidente mandó el proyecto de ley al Congreso.
* Centralización de la información: se creará un sistema de información nacional para todas las denuncias de violencia de género que recibe el Estado. Va a reunir las alertas que lleguen a la línea 144, las denuncias que entren por el 911 y las comisarías y se cruzarán datos con otros organismos para hacer un seguimiento de cada caso, víctima y agresor.
* Acción desde la primera alerta: con esa información se podrá proteger a las mujeres desde el primer momento y dar una respuesta según el nivel de riesgo que asigne el sistema a cada caso: desde visitas periódicas de un tutor hasta un pedido de restricción para el agresor y tobillera, pasando por la vigilancia del domicilio de la víctima, traslados y contactos periódicos con su grupo de apoyo.
