Además, Facundo Llamas no podrá salir ni para comprar víveres. El juez Alejo Ramos Padilla también resolvió secuestrarle la camioneta en la que viajaba.
El joven argentino que volvió de Brasil e incumplió el aislamiento obligatorio, fue embargado por $500.000 para afrontar los costos del procedimiento de seguridad para aprehenderlo y no podrá salir ni a comprar víveres, según lo dispuso el juez federal Alejo Ramos Padilla.
Además de quedar detenido con prisión domiciliaria, Facundo Llamas fue llamado a indagatoria y el fiscal resolvió secuestrarle la camioneta en la que viajaba y todas las tablas de surf que tenía en el vehículo, además de fijar una medida cautelar sobre su madre y otras personas que pudieran estar acompañándolo para que cumplan un estricto aislamiento de 14 días consecutivos.
El surfer está imputado por los delitos previstos en los artículos 205 y 239 del Código Penal en lo que sería una segunda causa penal en su contra, similar a la que ayer le abrió el juez federal de San Isidro Lino Mirabelli, también por incumplimientos de normas tendientes a evitar la propagación de epidemias y desobediencia.
Llamas fue demorado sobre la autopista Panamericana cuando regresaba desde Brasil y, por violación de la cuarentena, fue escoltado por personal de Prefectura Naval hasta un departamento del barrio porteño de Flores. Apenas se retiraron los efectivos de la fuerza de seguridad que lo habían escoltado se fue del lugar, tal cual registró un vecino en un video con su celular. El joven de 27 años decidió trasladarse a la ciudad balnearia de Ostende.
El caso que lleva adelante Ramos Padilla se originó por la denuncia de un vecino y fue considerado como una “violación flagrante” de las restricciones a la circulación en vía pública contempladas por el aislamiento obligatorio dispuesto por el Gobierno nacional.
El juez de Dolores ordenó que se mantenga custodia policial frente al domicilio en el que desde esta madrugada se encuentra Llamas y también notificó a autoridades municipales para que, en razón de que el imputado y su/s acompañante/s no pueden abandonar esa vivienda, le provea alimentos, medicamentos y elementos de higiene que les resulten indispensables.
Desde el servicio de salud municipal también se dispuso el envío de personal para realizar un primer control del joven, que en principio no presenta ningún síntoma de enfermedad.