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“Estoy arrepentido de lo que hice. No soy un asesino”, dijo el panadero que mató al ladrón que quiso asaltarlo

Cuatro delincuentes intentaron robarle la camioneta a un comerciante en Rafael Castillo: dos de ellos escaparon, uno murió y el otro fue detenido. Hoy el fiscal Emilio Spatafora indagará al sospechoso detenido, mientras espera resultados de peritajes.

El sábado por la tarde, cuatro delincuentes armados intentaron asaltar al panadero Gerardo Caivano en el partido bonaerense de La Matanza mientras iba en su camioneta acompañado de su hijo de 15 años.

Como reacción, el comerciante forcejeó con uno de ellos y le sacó su arma calibre 9 milímetros, con la que finalmente asesinó a uno de los ladrones, mientras otro era reducido y golpeado por vecinos y los otros dos cómplices huían.

“Estábamos lavando la camioneta y le dije a mi hijo de ir a dar una vuelta. Me vinieron a apretar. No recuerdo nada. Salieron de la nada. Lo que recuerdo es que le pedí que me deje bajar a mi hijo y que tenía el arma en la cabeza”, relató Gerardo ante los medios.

Hoy y de manera virtual, el fiscal Emilio Spatafora, del Fuero Penal de Responsabilidad Juvenil del Departamento Judicial La Matanza, indagará al delincuente linchado por los vecinos y que fue detenido.

La Justicia decidió no adoptar ninguna medida restrictiva de la libertad contra el comerciante asaltado por considerar, por el momento, que actuó en su legítima defensa.

“No tuve la intención de matar. Estoy arrepentido de lo que hice. No soy un asesino. No soy Dios para sacarle la vida a nadie. No fue apropósito, lo lamento”, dijo el panadero.

El fiscal Spatafora aguarda además en las próximas horas los resultados de una serie de peritajes balísticos, el análisis de imágenes de cámaras de seguridad y los resultados de la autopsia, que se realizará hoy, para luego citar a declarar al panadero para que aporte más detalles sobre lo sucedido y evaluar su situación procesal.

El hecho

Ocurrió este sábado en las calles Yanzi y Pita de la localidad de Rafael Castillo, donde Caivano se encontraba estacionado junto a su hijo de 15 años a bordo de su camioneta, una Volkswagen Amarok gris. En ese momento, fue sorprendido por un Chevrolet bordó del que bajaron cuatro delincuentes armados que lo amenazaron con la intención de robarle su vehículo.

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De acuerdo al relato de los testigos, en ese instante el panadero bajó de la camioneta y enfrentó a los asaltantes. El hombre logró sacarle de las manos a uno de ellos el arma la cual finalmente realizó varios disparos contra uno de sus compañeros, de 17 años, Dylan G. C, vecino de Isidro Casanova.

Así los vecinos redujeron y retuvieron al ladrón que quedó detenido

El joven tenía, según determinaron luego los peritos: un arma 9 milímetros de utilería, cayó muerto en ese instante y quedó tendido boca abajo sobre un charco de sangre en el asfalto.

Por su parte, dos de los ladrones escaparon corriendo a los tiros hacia la calle Aguapey, donde el auto en el que llegaron los esperaba. Una cámara de seguridad del barrio registró la huida de los dos jóvenes que aún no fueron identificados, continúan prófugos y tendrían en su poder, según se investiga, una pistola 9 milímetros.

Mientras tanto, el tercer delincuente, también de 17 años, que había peleado cuerpo a cuerpo con el comerciante, fue reducido en el lugar por vecinos y comerciantes de la misma cuadra, que lo insultaron y patearon en el suelo hasta que fue detenido por efectivos de la Comisaría 3° de Rafael Castillo y trasladado a un instituto de menores.