El martes pasado discutió con unos gemelos dentro de un bar. Tras la pelea, el dueño del local los echó y en la calle fue agredido a palazos en la cabeza. Murió el sábado tras agonizar cuatro días. “A la madre le avisaron que tenía un traumatismo de cráneo grave y que esperarían a que ella viajara para decidir la desconexión”, contó un amigo de la víctima.
Un argentino fue asesinado en Brasil tras una pelea con hermanos gemelos en un bar de la playa en la ciudad de Preá, al nordeste brasileño.
El hecho ocurrió el martes pasado, y tras cuatro días de agonizar, murió. Aún no hay detenidos: los agresores se encuentran prófugos y están siendo buscados según detalló Télam. “La Policía Civil del Estado de Ceará realiza diligencias con el objetivo de identificar y detener a los involucrados en el crimen”, indicó el informe policial.
La víctima, identificada como Rodrigo Manuel Duartes, conocido como “El Bocha”, oriundo de Córdoba, se instaló en dicha ciudad hace dos años. Allí trabajaba en carpintería y pintura.
Un amigo de Duartes, Nicolás, contó que la semana pasada el argentino de 33 años habló por un grupo de WhatsApp que tienen en común y les contó que iba a ir “a una fiesta que organizaba su jefe en una posada”.
“Nos mensajeó hasta la 1 de mañana. Al otro día no tuvimos contacto con él y el jueves nos enteramos de que había tenía una pelea y que estaba internado en grave estado”, contó.
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Según se enteró cuando se contactó con amigos de Duartes de Brasil a través de Instagram, discutió con unos “gemelos” dentro del bar en la playa. Tras la pelea, el dueño del local los echó y en la calle fue agredido a palazos en la cabeza: los atacantes escaparon.
Rodrigo fue trasladado de urgencia al Hospital Santa Casa de Misericordia. “A la madre le avisaron que tenía un traumatismo de cráneo grave y que esperarían a que ella viajara para decidir la desconexión”, contó Nicolás.
Horas después, el cónsul argentino en Recife, Alejandro Funes Lastra, les indicó que a Duarte finalmente lo habían operado. Tras la intervención, el sábado por la tarde murió. La madre, se enteró de la muerte de su hijo mientras viajaba de urgencia hacia Brasil.
La mujer arribó ayer por la tarde y decidió que no repatriará su cuerpo. “Nos pidió disculpas porque lo iba a despedir allá. ‘El Bocha’ estaba contento ahí y sentía que aquella era su casa. Por eso su madre decidió no repatriar el cuerpo y hoy unos amigos le consiguieron una posada para que realicen un velorio íntimo”, agregó Nicolás.
“Estaba trabajando como carpintero. Estaba bien. Era muy querido en la zona, en Preá, que es un pueblo de pescadores”, dijo una vecina y amiga de la madre. Ambas fueron a visitarlo a Brasil el año pasado durante dos meses.
Si bien el Consulado Argentino no puede brindarles ayuda económica, la familia de Duartes reclama algún tipo de asistencia legal para que se haga justicia por su muerte y se encuentre a los culpables.
