Juan Ignacio Buzali recordó aquel 29 de julio de 2010 cuando «motochorros» la asaltaron y la balearon en la panza cuando estaba embarazada de 8 meses, lo que provocó la muerte de su bebé Isidro. Para él, Berni lo “quiere preso”.
Juan Ignacio Buzali, esposo de Carolina Píparo, habló por primera vez desde la cárcel donde está detenido tras atropellar a dos jóvenes que circulaban en moto durante la madrugada de Año Nuevo, en La Plata.
Desde la Alcaidía Penitenciaria de Lisandro Olmos, donde está detenido desde el 9 de enero, habló con Canal 13 y apuntó a Sergio Berni, ministro de Seguridad bonaerense.
“¿Por qué estoy preso? Es una buena pregunta. En siete días no se puede hacer una investigación para calificarme como me calificaron”, afirmó Buzali. Y profundizó: “En un momento pierdo la identidad. El caso se empezó a llamar Píparo. Ahí dije ‘acá hay otra cosa’. El ministro empezó a decir por todos los canales de televisión que mi mujer estaba llamando al secretario de Seguridad, cuando en realidad el teléfono se lo habían robado en el asalto. Que íbamos borrachos, cuando no hay un solo testimonio en la causa que diga eso. El ministro Berni me quiere preso. Estoy seguro”.
Buzali dijo ser víctima de un ataque dirigido a la diputada provincial. “Acá hay un punto que es clave: mi mujer. Mi mujer es una piedra en el zapato para ciertos sectores de la política. Y estoy seguro que donde la puedan dañar, la van a querer dañar. Pero también sé que es una luchadora de la vida (llora). Y solo nosotros sabemos lo que sufrimos en 2010 (Píparo, embarazada de ocho meses, fue herida en una salidera bancaria y su bebé, Isidro, murió) y cómo transformamos ese dolor en fuerza. Eso no tiene nombre y muy poca gente lo puede hacer”, relató.
Sobre el hecho por el que está preso, el hombre recordó que en la madrugada de Año Nuevo “la vi (a Píparo) con un revolver en la cabeza y dije ‘otra vez no nos puede estar pasando esto’”, aseguró Buzali. “Imaginate que lo que veo en televisión es que a los delincuentes los van soltando uno a uno y a mí me viene a buscar la Policía. ¿Cómo puede ser? ¿A ellos los sueltan y a mí me meten preso?”, continuó el marido de la diputada provincial en la entrevista.
“¿Qué justiciero llama al 911? Decime qué justiciero llama al 911. Yo llamé seis veces. ¿Para qué lo voy a hacer? ¿Para decir ‘sí, señores, voy a ir a asesinar a alguien’?”, se defendió Buzali.
Buzali permanece detenido luego de que en la madrugada del 1° de enero, cuando la diputada provincial y funcionaria platense denunció que fue asaltada por tres parejas de «motochorros» en la calle 47, entre 15 y 16, en momentos en que su marido estacionó para dejar a su padre en su casa.
Según la legisladora, cuando se dirigía con su esposo a realizar la denuncia a bordo de su Fiat 500L negro con techo blanco, volvieron a ser interceptados por los que creyeron que eran los mismos delincuentes que los habían asaltado.
En la intersección de las calles 21 y 40, Buzali chocó por detrás a una de las motos en la que viajaban dos jóvenes a los que dejó tirados en el piso pese a las lesiones que habían sufrido.
La magistrada rechazó el pedido de detención domiciliaria que había solicitado la defesa de Buzali, aunque ordenó abrir un incidente por separado para evaluar «una posible morigeración de las condiciones de detención», al considerar en su favor la ausencia de antecedentes penales, su situación personal y que, según la fiscalía, ya está producida la mayor parte de la prueba en la causa.