El viernes vence la disposición vigente. Migraciones y Transporte creen que es viable seguir ampliando lentamente el cupo de pasajeros pero Salud quiere mantener un tope para contener la propagación del virus.
A días de que termine la decisión administrativa que admitió el ingreso de 7000 viajeros por semana, el Gobierno mantiene reunionesa contrarreloj para definir las nuevas medidas.
Si bien desde el Ministerio del Interior (a través de Migraciones), Transporte (por intermedio de la ANAC) y Relaciones Exteriores creen que viable seguir ampliando lentamente el cupo de pasajeros, desde Salud quieren mantener un tope para evitar nuevos focos de contagio de la variante Delta.
“Tiene sentido mantener las restricciones a los vuelos para ralentizar la propagación de la Delta y seguir aplicando vacunas. La decisión que tomamos cuando cerramos los ingresos fue acertada porque se ganó mucho tiempo”, señaló un importante colaborador de la Casa Rosada al tanto del análisis de situación que se realiza en los despachos oficiales, en diálogo con La Nación.
El 9 de julio, el presidente Alberto Fernández firmó una normativa con un plan progresivo para los regresos desde el exterior: “Los cupos semanales en vuelos de pasajeros para el reingreso al territorio nacional de los argentinos, las argentinas y residentes que se encuentren en el exterior, conforme el siguiente detalle: de 5200 plazas, para la semana del 10/7/2021 al 16/7/2021, inclusive; de 6300 plazas, para la semana del 17/7/2021 al 23/7/2021, inclusive; y de 7000 plazas, para las semanas del 24/7/2021 al 30/7/2021 y del 31/7/2021 al 6/8/2021, inclusive, respectivamente”.
Es decir que actualmente pueden ingresar 7000 residentes por semana, a un promedio de 1000 cada 24 horas.
