Están acusados de haber alterado la escena en la que fue asesinado el futbolista juvenil de Barracas Central para fingir un enfrentamiento armado.
Después de la detención de 5 nuevos policías en la causa que investiga la muerte del joven Lucas González, futbolista de Barracas Central en noviembre, el juez de instrucción Martín Del Viso ordenó serán indagados hoy.
La medida alcanza al subcomisario Ramón Jesús Chocobar, al oficial Sebastián Baidon, al oficial primero Jonathan Alexis Martínez, y a los oficiales Ángel Darío Arévalos y Daniel Rubén Espinosa, quienes ya están detenidos y les fueron secuestrados sus teléfonos celulares.
Los agentes están acusados de haber alterado la escena en la que fue asesinado el futbolista de 17 años con el fin de fingir un enfrentamiento armado. Las detenciones fueron pedidas por el fiscal de la causa, Leonel Gómez Barbella, con quien el juez coincidió en que “no puede descartarse” que los imputados “puedan destruir, modificar, ocultar, suprimir o falsificar elementos de prueba, así como influir en los testigos del hecho”.
“Las circunstancias relatadas no pueden ser neutralizadas con cautelares de menor intensidad que la detención de los imputados, medida que al menos de momento se rebelan como necesarias, idóneas y proporcionadas en este estado de la investigación”, explicó el juez.
Los nuevos detenidos se suman a los tres policías sospechados como presuntos autores materiales del crimen y otros seis, que también son acusados por el encubrimiento posterior.
Por otra parte, el juez, rechazó los pedidos de detención del comisario inspector Daniel Santana, el comisario Rodolfo Alejandro Ozan, la principal Teresa María Luján Scorza, el oficial Santos Ochoa, el principal Damián Ezequiel Lobos y Verónica Andraca, de la División Asuntos Penales y Contenciosos del Departamento Asesoría Legal Policial.
“Más allá de sus posibles permanencias físicas en el sitio donde se detuvo a las víctimas, no se aprecia por ahora ningún elemento que haga suponer la eventual participación de alguno de ellos en los hechos investigados”, consideró el juez Del Viso.
Lucas González, quien tenía 17 años y jugaba en Barracas Central, fue asesinado de un balazo en la cabeza por policías que interceptaron el auto Volkswagen Suran en el que se desplazaba con tres amigos en la intersección de Iriarte y Luna.
Los policías, que circulaban de civil en un Nissan Tidda, no se identificaron como tales y los adolescentes pensaron que se trataba de delincuentes, por lo que el conductor del Volkswgen intentó escapar.