El juez Claudio Bonadio dio por clausurada la instrucción y envió a juicio oral a Cristina Kirchner, acusada de ser jefa de una asociación ilícita que se dedicó a la recaudación “de fondos ilegales” y se le atribuyeron 28 hechos de cohecho pasivo.
A más de un año, finalmente el juez Claudio Bonadio dio por cerrada la instrucción y envió a juicio oral la causa conocida como los cuadernos de las coimas, un expediente que cuenta con 172 procesados y 31 imputados colaboradores.
En la casusa, la expresidenta Cristina Kirchner está acusada de ser Jefa de una asociación ilícita que se dedicó a la recaudación “de fondos ilegales”, es decir sobornos y se le atribuyeron 28 hechos de cohecho pasivo.
Junto a la candidata a vicepresidenta, fueron enviados a juicio en calidad de organizadores Julio De Vido, Roberto Baratta, José López, y como miembro de la asociación el exchofer Oscar Centeno y un extenso listado de empresarios. Bonadio volvió a pedir el desafuero de la Senadora. Entre los empresarios se encuentra Ángelo Calcaterra, primo de Mauricio Macri, Carlos Wagner, Néstor Otero, Benjamín Romero, Enrique Pescarmona entre otros, todos acusados sólo de cohecho.
De esos 172 acusados, en esta instancia Bonadio elevó a juicio a 53, entre exfuncionarios y empresarios. El juez resolvió sobreseer a los empresarios por el delito de asociación ilícita, y sólo deberán responder como acusados por cohecho activo. Asimismo, sobreseyó de la acusación a los integrantes de La Cámpora Eduardo “Wado” de Pedro, Andrés Larroque, Máximo Kirchner, Julián Álvarez, y a los empresarios Sergio Szpolski.
Además, según consigan Clarín, en uno de los artículos de la resolución, Bonadio volvió a requerir al Senado el desafuero de Cristina Kirchner para “cumplir con la prisión preventiva dispuesta”.
En esta elevación a juicio, también incluye a Isidro Bounine, Juan Manuel Campillo, Sergio Todisco, Carolina Pochetti, y otros integrantes del entorno de Daniel Muñoz (exsecretario de Néstor Kirchner), acusados de lavado de dinero por la adquisición de bienes en el exterior.
Los empresarios, entre los que se encuentra Ángelo Calcaterra, Carlos Mundin, Luis Betnaza, Gerardo Ferreyra, Armando Loson, Alberto Taselli, Eduardo Hugo Eurnekian, Enrique Pescarmona, Héctor Zabatella, Néstor Otero, Aldo Roggio, entre otros, irán a juicio sólo acusados de cohecho. El extitular de la Cámara de la Construcción Carlos Wagner y el financista Ernesto Clarens afrontarán la instancia oral bajo la de organizadores de la asociación ilícita. Se les atribuyó varios hechos de cohecho activo, al igual que al empresario Gerardo Ferreyra.
La causa
La causa se conoció en la madrugada del 1 de agosto, tras las más de una decena de detenciones pedidas por el fiscal del caso, Carlos Stornelli, y ordenadas por el juez, Claudio Bonadio. El primer detenido fue Oscar Centeno, el exchofer de Roberto Baratta que entre 2003 y 2015 quien escribió todos los movimientos de su jefe y otros hombres del desaparecido Ministerio de Planificación.
En los “famosos cuadernos”, detalló quiénes y cómo se entregaban bolsos con dinero proveniente de los sobornos en la Obra Pública, como así también hacia dónde iban y quiénes los recibían. Los edificios de las compañías más poderosas de la construcción local a la Quinta de Olivos o el domicilio particular del matrimonio presidencial, en plena Recoleta, formaron parte del raid detallado por Centeno.
los k un gran nido. de corrupcion