El establecimiento fue denunciado por la Defensoría del Pueblo de la provincia de Buenos Aires y vecinos por maltrato animal. Desde el gobierno municipal y provincial, nacional intimaron al establecimiento a que presente el plan de reconversión luego de que las sucesivas inspecciones revelaran varias irregularidades y la falta de autorización para su funcionamiento. Tras la cuarentena seguirá cerrado.
Luego de las denuncias de vecinos y de la Defensoría del Pueblo de la provincia de Buenos Aires en dos oportunidades, el zoológico de Luján fue cerrado por orden del Ministerio de Ambiente, quien será querellante para que se investiguen las denuncias.
Además, el ministerio y Desarrollo Sostenible de la Nación resolvieron que el establecimiento no podrá reanudar sus actividades al público tras la extinción del aislamiento social, preventivo y obligatorio por la actual pandemia por COVID-19.
Según el fundamento del cierre, es por no contar con una habilitación nacional y provincial, además de otras irregularidades e incumplimientos detectados respecto de la normativa nacional y provincial que regula la actividad.
Por su parte, desde el gobierno municipal y provincial, nacional intimaron al Zoo a que presente el plan de reconversión luego de que las sucesivas inspecciones revelaran varias irregularidades y la falta de autorización para su funcionamiento.
“Dado que el zoológico de Luján, en la actualidad, carece de habilitación provincial y nacional, se mantendrá cerrado, mientras esto siga de ese modo”, afirmó Sergio Federovisky, titular de la Secretaría de Control y Monitoreo Ambiental.
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Asimismo, desde la cartera anunciaron que “se le exigirá al establecimiento desde el Estado Nacional, en cumplimiento de la normativa nacional y provincial que regula la actividad, que presente en el lapso de 10 días el listado de marcaje y castración de su plantel faunístico”.
Las denuncias
Exempleados del lugar y vecinos denunciaron irregularidades dentro del predio que alberga a más de 100 animales, entre ellos 74 leones y gran cantidad de tigres.
Una supuesta quema y matanza de animales y las imágenes de lo que sería un cachorro de león congelado en una cámara frigorífica del predio alertaron a las autoridades que ya venían exigiendo la conversión del zoo en otro tipo de establecimiento.
En febrero, la cartera ambiental nacional, junto con la Municipalidad de Luján y personal de la Policía Ecológica de la provincia de Buenos Aires, realizaron un procedimiento de fiscalización en la institución, que derivó en la clausura de jaulas de leones, tigres, elefantes y guacamayos, al constatar cerca de 600 situaciones de transgresión (se facilitaba el ingreso de visitantes al interior de las jaulas) a una clausura preventiva efectuada a mediados de 2019, por incumplimiento de la Ley N° 12238 de la provincia de Buenos Aires, que establece la prohibición de contacto con la fauna.
