Joaquín Vinez fue asesinado de una puñalada en el corazón a manos de un delincuente que ingresó a robar a su casa.
En noviembre de 2018, Joquín Vinez de 19 años fue asesinado cuando dos delincuentes armados con cuchillos entraron a su casa en la ciudad de Cipolletti mientras él y su familia dormían.
Los amenazaron y casi sin mediar palabra, Matías Ezequiel Valdebenito (uno de los delincuentes) apuñaló al joven rugbier en el pecho y segundos después hirió al hermano en una pierna.
Joaquín murió apenas llegó al hospital tras perder una importante cantidad de sangre. El asesino y su cómplice, después de escapar de la casa de Vinez, intentaron robar un auto a menos de dos cuadras y apuñalaron al propietario. Pero gracias al llamado de una vecina, la policía llegó al lugar y tras una breve persecución, arrestaron a los sospechosos.
Desde entonces Veldebenito, hoy de 26 años, permaneció detenido y a menos de un año del asesinato, el tribunal integrado por los jueces Julio Sueldo, Marcelo Gómez y Laura González Vitale condenó a la pena de prisión perpetua al autor material por el delito de homicidio criminis causa.
El cómplice, por su parte, fue desligado de la muerte de Joaquín, aunque fue procesado por el robo ocurrido minutos después de salir de la casa de los Vinez.
En la audiencia, en la que no estuvo presente ni el imputado ni su abogado defensor, el juez Sueldo, al exponer los fundamentos, dijo que Veldebenito decidió apuñalar al joven de 19 años en el corazón ante la frustración de no haber podido concretar el robo, informó el diario La Mañana de Cipolletti.
El magistrado remarcó que la única pena prevista por el Código Penal para este delito es la prisión perpetua y que la decisión del tribunal fue unánime. De esta manera, el asesino deberá continuar alojado en el Penal 5 de Cipolletti para cumplir su condena.
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