El beneficio es otorgado a quienes cometieron delitos leves y con “riesgo sanitario”, mayores de 65 años y embarazadas.
El Tribunal de Casación bonaerense ordenó el arresto domiciliario para los presos “en riesgo de contagio por coronavirus” alojados en las cárceles de la Provincia.
La medida alcanzaría a casi 700 procesados y condenados por delitos leves con más de 65 años, embarazadas, con enfermedades pulmonares graves o madres que viven las cárceles con hijos menores, según consigna Clarín.
La defensora general de Mar del Plata, Cecilia Boeri presentó un hábeas corpus colectivo que luego fue apoyado por sus colegas de los 17 departamentos judiciales que trabajan enla Provincia.
En el fallo se reconoce “la gravísima situación de las personas privadas de la libertad, por la superpoblación en los centros de detención” y explica que a los efectos de contener la pandemia, “deben instrumentar medidas alternativas a la prisión o reexaminando las prisiones preventivas ya decretadas, dando prioridad a las personas en situación de riesgo”.
Desde que se propagó la pandemia, las autoridades del Ministerio de Justicia aceleraron las medidas preventivas y dispusieron recursos sanitarios, hasta los propios presos decidieron no recibir visitas. El contacto con familiares e íntimos está suspendido para el 90% de los reclusos.
De acuerdo con una nómina confeccionada por el el SPB y por el ministerio de Seguridad, en el Servicio Penitenciario hay casi 500 personas con enfermedades graves como tuberculosis, EPOC y otras pulmonares. Unos 150 tienen más de 65 años y hay 40 mujeres embarazadas o con niños dentro de los presidios.
Este beneficio no contempla a quienes hayan cometido delitos graves como violación, homicidio, robo agravado y violencia de género.
Cuando termine la pandemia y la Argentina quede fuera de riesgo por coronavirus, este beneficio se revocará en forma automática.