La policía ingresó a su vivienda después de las denuncias de varios vecinos por el olor nauseabundo.
Tras una llamada de los vecinos al 911 por un olor nauseabundo, la Policía encontró a una mujer muerta en su casa de Corrientes y junto a ella había un cadáver seco.
Según las primeras hipótesis, la mujer habría muerto luego de la intensa ola de calor que registro todo el NEA durante los primeros días de enero. Mientras que el esqueleto correspondería a su madre.
Ambos fueron trasladados al Instituto Médico Forense para realizar la autopsia y otros análisis correspondientes. “Recién el lunes (por hoy) estarían los resultados de la autopsia, por lo que la identidad de las dos muertas deberá esperar unos días más, ya que si no se puede identificarlas se necesitara un examen de ADN, algo que lleva varias semanas”, indicaron los investigadores.
Según detalló Norte Corrientes, vecinos alertaron a la policía para informar sobre el olor que salía de la casa y detallaron que hacía varios días que no veían a la mujer que vivía allí.
Por tal motivo, agentes policiales fueron hasta el lugar, ingresaron y se encontraron con un cadáver en estado de descomposición en una de las habitaciones y con un esqueleto que tendría al menos dos años de antigüedad.
“Por el momento no podemos confirmar nada, ya que es un esqueleto seco, que llevaba más de dos años, presumimos que sería la progenitora, teniendo en cuenta que ambas vivían juntas”, dijeron vecinos al Diario Norte.
Según los peritajes hechos en el lugar y con las primeras examinaciones al cuerpo, descartaron lesiones compartibles con arma blanca o disparos.
La causa está caratulada como “averiguación de causales de muerte” en la Comisaría 7°, donde intentan localizar a algún familiar de las víctimas fatales.
