Lucas Ghi recibió tres denuncias, acusado de incentivar el consumo de drogas a través de una campaña que se hizo durante un festival solidario.
Tras la polémica por la campaña del municipio de Morón que brindaba consejos sobre cómo consumir drogas “de manera responsable”, se presentaron tres denuncias penales contra el intendente Lucas Ghi por incentivar el consumo de estupefacientes.
La primera de las presentaciones fueron presentadas por el abogado Fernando Sarabozo, el representante de Jóvenes Republicanos Ulises Chaparro y el diputado de Juntos por el Cambio Waldo Wolff.
Todas apuntan contra el jefe comunal, y otros funcionarios de la Dirección de Juventudes, quienes estuvieron a cargo de la organización del festival cultural, recreativo y gastronómico para toda la familia que terminó en un escándalo por la difusión del folleto sobre “consumo responsable de drogas”.
“Los funcionarios públicos no deben incentivar este tipo de conductas nocivas para la salud, ni naturalizarlas, todo lo contrario, su accionar debe estar dirigido a que se eviten. Es sugestiva esta recomendación a personas que transitan el camino de las drogas y de alguna forma son esclavos de estas adicciones”, sostiene el escrito presentado por el letrado Sarabozo ante el Juzgado Federal 1° a cargo del juez Martín Ramos.
Las denuncias contra el intendente de Morón
La denuncia argumenta que el intendente Ghi y sus funcionarios se enmarca dentro del artículo 28 de la Ley 23.737, que expresa: “El que públicamente imparta instrucciones acerca de la producción, fabricación, elaboración o uso de estupefacientes, será reprimido con prisión de 2 a 8 años”.
El legislador de la oposición se expresó a través de las redes sociales para informar respecto de la presentación realizada. “La campaña del intendente Ghi no tiene el propósito de prevenir el consumo de estupefacientes, sino de difundir públicamente su uso. Esa conducta se encuentra expresamente prohibida en el artículo 12”, sostuvo el diputado y recordó que “será reprimido con prisión de 2 a 6 años… el que preconizare o difundiere públicamente el uso de estupefacientes, o indujere otro a consumirlo”.
Por su parte, Chaparro recordó: “Es tarea de la política combatir al narcotráfico. Las drogas impiden a los jóvenes progresar en la vida, destruyendo sus neuronas, arruinando familias, y generando inseguridad y delincuencia. No existe forma segura de drogarse. Y por supuesto el Frente de Todos lo sabe, pero los negocios pesan más que la vida de los vecinos”.