La medida afecta la atención en clínicas, sanatorios, laboratorios y geriátricos. Solo se atenderán urgencias. “Lxs trabajadorxs de Sanidad damos todo desde el primer día de la pandemia y nuestros salarios siguen desactualizados. Unidxs vamos a lograr que se visibilice y se escuche nuestro legítimo reclamo. Exigimos una recompensa salarial inmediata”, reclamó el sindicato en redes sociales.
Después de que fracasaran las negociaciones por las paritarias sanitarias 2021, los gremios agrupados en la Federación de Asociaciones de Trabajadores de la Sanidad (Fatsa), que nuclea a las clínicas y sanatorios privados, inicia hoy un paro de tres horas por turno que afectará a las clínicas, sanatorios, hospitales privados, laboratorios y geriátricos, con atención únicamente de las urgencias.
“Lxs trabajadorxs de Sanidad damos todo desde el primer día de la pandemia y nuestros salarios siguen desactualizados. Unidxs vamos a lograr que se visibilice y se escuche nuestro legítimo reclamo. Exigimos una recomposición salarial inmediata. Paramos 3 horas por turno”, indicaron desde la cuenta del Sindicato de Trabajadores de la Sanidad Argentina, filial Buenos Aires.
¡VAMOS COMPAÑERXS, JUNTXS DECIMOS #SanidadEsPrioridad!
Hoy fuimos muchos participando en las Asambleas de cada establecimiento, demostrando nuestra unión y fuerza. Alzamos nuestras banderas y nuestra voz en una jornada histórica que mañana sigue con el paro de 3 hs por turnos. pic.twitter.com/ZZEtqaY6tS
— A.T.S.A. Bs.As (@AtsaBsAs) March 25, 2021
Las medidas sindicales se adoptan luego de que fracasaran las negociaciones paritarias: los gremialistas pidieron un aumento del 16% a partir del mes de abril, algo que fue rechazado por las autoridades de la Federación Argentina de Prestadores de Salud (FAPS).
Según anticipó el el titular de la Asociación de Trabajadores de la Sanidad (ATSA) Buenos Aires, Héctor Daer, en caso de no tener una respuesta favorable, el próximo martes llevarán a cabo una huelga de 24 horas.
“Hay que encontrar salidas, no queremos ir a una medida de fuerza, pero ¿hasta cuándo vamos a esperar? Esto se da en un año donde las consecuencias sanitarias son complejas, con el personal cansado, abatido y encima que no le alcanza la plata para llegar a fin de mes”, explicó el sindicalista.