Por videoconferencia, Cristina Castro fue citada a declarar como testigo en la causa en la que se investiga la desaparición y muerte de su hijo. Según uno de los abogados de la familia, la mujer brindará detalles sobre el amuleto que pertenecería a la víctima y que fue encontrado en el puesto de vigilancia de la Policía en Teniente Origone.
Cristina Castro, la mamá de Facundo Astudillo Castro, declarará en calidad de testigo en la causa en la que se investiga la desaparición y muerte del joven de 22 años, cuyo cuerpo fue encontrado el pasado 15 de agosto en un cangrejal en Villarino.
La mujer deberá presentarse desde las 9, mediante videoconferencia, ante los dos fiscales que se sumaron a la causa Andrés Heim, de la Procuraduría de Violencia Institucional (Procuvin); y Horacio Azzolin, jefe de la Unidad Especializada en Ciberdelincuencia (Ufeci), confirmó Leandro Aparicio, uno de los abogados de la familia.
Por otra parte, Luciano Peretto, el otro de los abogados de la familia, anticipó que Cristina brindará detalles sobre el amuleto que pertenecería a la víctima y que fue hallado en el puesto de vigilancia de la Policía en Teniente Origone: se trata de la pequeña sandía de madera que contiene una vaquita de San Antonio, hecha en el mismo material, y que fue un regalo de la abuela de Facundo para el joven y su hermano.
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Este objeto fue encontrado durante un allanamiento realizado a principios de agosto en la dependencia de la Policía de la mencionada localidad de Provincia lindera Mayor Buratovich, donde el joven fue visto con vida por última vez.
Por su parte, las declaraciones testimoniales de Daiana González, la exnovia del joven, y de dos amigos de la víctima que estaba previsto para esta semana, fueron postergadas, aún sin fecha.
La causa
La semana pasada, los fiscales rechazaron un pedido de los abogados de Cristina para que se cite a declarar a dos oficiales de Policía del puesto de vigilancia de Teniente Origone, ya que aún se desconoce si pudieron tener “algún grado de participación en el hecho” y deban ser llamados eventualmente a declarar como imputados.
El joven fue visto con vida por última vez el 30 de abril último, cuando en plena cuarentena por el coronavirus dejó su casa de Pedro Luro para ir a Bahía Blanca a ver a su exnovia.
En el trayecto fue detenido al menos una vez en uno de los controles policiales por violar el aislamiento, pero lo dejaron seguir y luego desapareció.
