La víctima, identificada como Noemí Funes, de 41 años, iba a denunciarlo porque sospechaba que abusaba de su hija de 13 años. El fiscal Walter Mércuri investiga el hecho.
Una mujer de 41 años fue asesinada este miércoles a la madrugada por un efectivo de la Policía de la Provincia de Buenos Aires de 24 años de edad, que tras el ataque, se quitó la vida en una casa de la localidad bonaerense de General Madariaga.
Cerca de la 1:45 de la mañana un llamado al 911 trasladó a los efectivos de la comisaría local hasta una casa ubicada en la calle Arias y Fray Justo Santa María de Oro de la ciudad, donde estaban los cuerpos de Franco Mauricio Torres, un efectivo de la policía que integraba el área de Inteligencia Criminal en Pinamar, junto al de Graciela Noemí Funes, a quien habría asesinado de un disparo en la cabeza para luego quitarse la vida.
En la casa donde ocurrió el hecho también estaba una adolescente de 14 años, hija de la víctima.
En el lugar se secuestró el arma reglamentaria de Torres, una pistola marca Bersa Thunder calibre 9 milímetros con 11 cartuchos en el cargador y uno en la recámara.
Los cuerpos fueron trasladados a Pinamar para la realización de las autopsias y la Policía Científica llevó a cabo pruebas de dermotest en las manos de ambos en búsqueda de rastros de pólvora que determinen quién disparó.
La investigación quedó ahora en manos del fiscal Walter Mercuri, a cargo de la Unidad Funcional N° 8 de General Juan Madariaga.
Según informaron fuentes policiales, no se registraron antecedentes de denuncias entre la mujer y el oficial ni medidas cautelares vigentes. El fiscal ordenó también un dermotest en las manos de ambas víctimas para determinar quién accionó efectivamente el gatillo.