El testimonio del nene fue la clave para identificar al asesino. El acusado fue detenido y se le secuestró en su casa una remera y un pantalón con manchas hemáticas, que estaban escondidos debajo de un colchón.
Un joven de 19 años quedó detenido e imputado por el femicidio de su vecina, quien fue encontrada asesinada a golpes el domingo en su casa en Luján de Cuyo, Mendoza.
Roberto Daniel Martínez esperó a la víctima, Mercedes Margarita Zárate, quien volvía de trabajar, la golpeó brutalmente y la apuñaló con un destornillador, causándole la muerte. El único testigo, fue el hijo de 9 años de la mujer quien sufrió heridas por golpes, pero logró escapar de su agresor y pedir ayuda. Su declaración fue clave para esclarecer el femicidio.
Si bien en principio, por el femicidio se sospechó de una expareja de Zárate, quien se encuentra con prisión domiciliaria en su casa del Departamento de Godoy Cruz, pero los investigadores descartaron esta hipótesis debido a que el monitoreo electrónico determinó que ese sospechoso nunca salió de su vivienda y por las declaraciones del niño.
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Por lo que rápidamente se logró la detención del joven López Martínez, quien había tenido una relación afectiva con la víctima. La sospecha apunta a que López llegó borracho a encontrarse con Zárate y la agredió a golpes de puño tras una discusión, tras lo cual le provocó heridas con un destornillador.
El joven de 19 años fue imputado por el fiscal de Mendoza Carlos Torres por el delito de “homicidio criminis causa en grado de tentativa”, porque entiende que intentó matar al hijo de la mujer para que no pudiera delatarlo.
