La falsa médica había sido condenada a nueve años y medio de prisión por homicidio culposo y ejercicio ilegal de la medicina. La Justicia le impuso un bozal mediático.
La falsa médica Mónica Cristina María Rímolo, que usaba el seudónimo de “Giselle” y fue conocida públicamente por haber sido pareja de Silvio Soldán, logró la libertad condicional y dejó el penal de mujeres de Ezeiza.
La jueza María Jimena Monsalve ordenó el beneficio porque “cumplió 2/3 partes de la condena”, pero tendrá que cumplir algunos requisitos entre los que se destaca un bozal mediático y en redes sociales: no puede hablar de la causa. “En caso de no cumplir, regresa a la cárcel”, inmediatamente.
Para darle el beneficio, la jueza Monsalve se apoyó en distintos informes del servicio penitenciario, favorables a Rímolo en cuanto a su labor y conducta: “Ha venido cumpliendo de forma satisfactoria con los objetivos establecidos desde las distintas áreas (trabajo y educación). El Consejo Correccional la calificó con conducta ejemplar diez (10) y concepto muy bueno siete (7), y consideró –mediante Acta nº 118/20– por unanimidad propiciar la concesión de las salidas transitorias”, se resaltó en el fallo.
En 2012, Rímolo fue condenada a una pena de 9 años de prisión no solo por ejercicio ilegal de la medicina, sino también por haber realizado más de setenta estafas, traficar medicamentos peligrosos para la salud, pero su caso se agravó por la muerte de una de sus pacientes.
En ese sentido, fue el homicidio culposo de Lilian Stella Díaz, una mujer de 41 años que falleció el 30 de junio de 2001 tras haber ingerido, durante cinco meses, pastillas y gotas para adelgazar, recetadas por Rímolo.
Tiempo después, se supo que las pastillas contenían drogas que causaron un desequilibrio metabólico que derivó en la muerte.
Por las apelaciones de sus abogados, siguió libre hasta que en 2017, cuando la Corte Suprema de Justicia confirmó lo actuado y la Policía la arrestó en la casa de Don Torcuato que compartía con su pareja de ese entonces, Juan Gainedú.