Además, María Laura Garrigós de Rébori, afirmó que, a raíz de la pandemia y las medidas restrictivas impuestas para contener su propagación, hubo “una disminución importantísima de delitos” y anticipó que después de la cuarentena habrá “un pico de delitos contra la propiedad” producto de la crisis económica.
La nueva interventora del Servicio Penitenciario Federal (SPF), María Laura Garrigós de Rébori, negó que por el coronavirus haya existido una liberación masiva de detenidos y afirmó que, a raíz de la pandemia y las medidas restrictivas impuestas para contener su propagación, hubo una disminución de delitos.
En declaraciones radiales, la interventora aseveró que “no pasó nada de esto que tanto atemorizaba a la población” y destacó la importancia de “darle nuevas herramientas” a las personas que permanecen detenidas “para que no vuelvan a tener que delinquir o caer en el delito”.
“La verdad es que la gente le tiene miedo a los presos, deja de ver que los presos son personas, por eso una de las tareas es traer a la comunidad a la cárcel y que la cárcel trascienda las barreras físicas y hoy por los medios virtuales se va a poder hacer”, consideró.
Por otra parte, advirtió que actualmente, hay 12 mil detenidos en los penales que dependen del Servicio Penitenciario Federal y sostuvo que “se bajó muchísimo” la cantidad a raíz de la pandemia porque hay una “disminución importantísima de delitos”.
“Además se otorgaron pulseras para los arrestos domiciliarios, así que esto desinfló un poco la olla a presión”, explicó Garrigós de Rébori, quien también señaló que podría haber “un pico de delitos” tras la cuarentena a raíz de la crisis económica. “Todas las crisis económicas a través de la historia siempre han producido esto, y eso va a revertir esa situación de acomodamiento en las cárceles”, dijo.
“El día que salgamos de la cuarentena, con la crisis económica que vamos a estar padeciendo nosotros y el mundo entero, vamos a tener un pico de delitos contra la propiedad”, precisó.
