En un discurso caliente, el Presidente se enfrentó a las críticas kirchneristas. “Sus insultos no hablan de mí, hablan de ustedes”, les dijo. Además reconoció la pobreza y la lucha contra la inflación y aumentó un 46% las AUH.
El presidente Mauricio Macri inauguró el 137° período de sesiones ordinarias del Congreso con un discurso en clave electoral, con fuertes críticas al kirchnerismo, anuncios sociales y cruces con la oposición. En el cuarto y último discurso de su gestión ante el Congreso, el Jefe de Estado puso el eje en el tema Seguridad, como con el nuevo régimen penal juvenil y un pedido para retomar el debate de la ley antibarrabravas.
Macri comenzó hablando del país que recibió su gestión y se sinceró: “Los cambios profundos requieren paciencia, lo peor ya pasó” y agregó: “Hoy podemos decir que la Argentina está mejor parada que en el 2015, hemos salido del pantano donde estábamos”.
Luego, se enfocó en la corrupción, con un claro discurso respecto de la herencia kirchnerista: «Es un estado que combate las mafias y previene la corrupción. La ley del arrepentido se convirtió en una pieza clave para el avance de las causas judiciales», dijo bajo críticas kirchneristas.
Y siguió: “Se acabó el tiempo en que los delincuentes se salgan con la suya mientras la mayoría trabajamos para sacar este país adelante», insistió mientras Michetti pedía silencio a los opositores. «Hablo de un Gobierno que respete los tiempos de la Justcia. Y todos debemos rendir cuentas: empresarios políticos, periodistas y hasta la familia del Presidente y el propio Presidente», dijo elevando el tono de voz.
En otro tramo de sus palabras, el líder de Cambiemos volvió a analizar las causas de la crisis económica: «Cuando empezamos a crecer y a asomar la cabeza como país, tuvimos tres shocks. La salida de capitales, la sequía que afectó al campo y la causa de los Cuadernos. Todo nos agarró a mitad de camino, porque recién estábamos saliendo, porque no habíamos terminado los cambios en los cimientos podridos y descuidados por décadas«.
MAcri aclaró que «si no hubiésemos tomado las medidas que tomamos la economía hubiera colapsado. Elegimos un camino de gradualismo que funcionó dos años y medio, donde aumentaron las exportaciones, creamos 700 mil puestos de trabajo y bajó la pobreza».
El mandatario reconoció la pobreza y la inflación y anunció: «Aumentaremos la asignación universal por hijo en un 46% y esperamos una baja de la inflación. Se cambia en serio cuando no se otorga esta asignación a cambio de un voto o una marcha».
«El único camino genuino para salir de la pobreza es el trabajo que se basa en la calidad de la educación. Insistiré este año con un proyecto de ley que cambie un artículo de la Ley Nacional de Educación. Los padres deben saber la verdad», explicó Macri.
Finalmente el presidente arengó a todos: «¡vamos argentinos! ¡vamos con fuerza! ¡Vamos en serio! ¡Vamos con coraje! ¡Vamos con pasión! Este es nuestro país y juntos lo vamos a sacar adelante. ¡Vamos Argentina, vamos Argentina!“