Hay cuatro detenidos, entre ellos la chica de 17 años. El principal sospechoso, de nacionalidad brasileña, había purgado una condena por otro crimen en su país.
Tres hombres y una adolescente de 17 años fueron detenidos por la muerte de un carpintero de la localidad de El Soberbio, en la frontera misionera con Brasil.
La víctima fue golpeado y ejecutado de un balazo en la nuca, en lo que sería el epílogo de un triángulo amoroso que involucró también a una adolescente de 17 años.
El cuerpo de Rodrigo Alvez, de 35 años, un carpintero que vivía en el barrio Unión y recientemente se había separado de su pareja, con quien tenía dos hijos fue hallado en una zanja el sábado a la tarde por un artesano que circulaba por la ruta costera 2.
El cadáver se encontraba pocos metros de una motocicleta y otros elementos personales, entre ellos una caja de profilácticos. El médico policial estableció que la víctima tenía fractura de cráneo y rostro, cortes y un balazo en la parte posterior del cuello.
El viernes a la tarde Alvez había ido hasta la casa de su ex pareja para ver a sus hijos. Luego, en la moto de un amigo partió rumbo a Picada Capivara para avisarle a su madre que se había suspendido un estudio médico que tenía programado. El carpintero utilizó por última vez el WhatsApp a las 16.45, pero nunca llegó a la casa de su mamá, de acuerdo con la investigación que realizó la Policía.
Según el trabajo de los agentes, permitió establecer que Alvez mantenía una relación amorosa clandestina con una joven de Colonia Paraíso y que su muerte podría tener relación con ese hecho.
De acuerdo a testimonios, los investigadores creen que el carpintero recibió mensajes de Luis, más conocido como “El brasilero” y para atraer a la víctima hasta el lugar donde se encontraba haciéndose pasar por su novia de 17 años con quien tendría una relación amorosa.
En esas circunstancias, Luis André Konrath, de 34 años, sacó un arma de la cintura y le pegó un tiro en la nuca al muchacho, que cayó pesadamente al suelo. El crimen contó con la participación de Ronaldo Konrath, el padre de Luis, quien lo golpeó en la cabeza con un machete. El homicida les apuntó con el arma a los testigos y amenazó de muerte para que no relataran lo que había sucedido.
El cadáver de Alvez fue llevado hasta una letrina, donde lo ocultaron hasta el anochecer.
Según la reconstrucción que pudo hacer la Policía, Carina se encargó de trasladar la moto, mientras que Luis, Ronaldo y Evaristo Zang cargaron el cadáver en el baúl de un Chevrolet Corsa con patente brasileña y llevaron hasta el lugar donde al día siguiente fue hallado.
La Policía allanó la vivienda, donde se detuvo a la adolescente, a “El Brasilero” y a Zang, también oriundo del vecino país.
Más tarde se logró apresar a Ronaldo Konrath, de 61 años, quien habría ocultado en Brasil el revólver calibre 32 utilizado en el crimen y también el celular de Álvez.
En el lugar se secuestraron ropas con manchas de sangre, una escopeta calibre 40 y también el coche, que tenía manchas rojizas en el baúl. También un martillo y varios machetes.
Fuentes policiales dijeron que Luis André Konrath, de 34 años, ya había estado preso en su país por un homicidio.