Thomas Domínguez, amplió su declaración indagatoria por escrito y si bien se negó a contestar preguntas del juez o del fiscal, se volvió a declarar inocente.
Uno de los seis detenidos por la violación grupal en Palermo amplió su declaración indagatoria con un escrito en el que aseguró que es “completamente inocente” del hecho y que nunca ingresó al auto donde se produjo el hecho ni supo lo que sucedía dentro.
Thomas Fabián Domínguez, es identificado en la causa como el del “peinado con rastas cortas y remera celeste” y que al momento de la violación estaba fuera del auto tocando la guitarra, pero que quedó filmado en un kiosco de Plaza Serrano besando y manoseando a la víctima.
Después de haber hecho el pedido hace una semana para ampliar su declaración, la indagatoria se hizo a través de una videoconferencia, pero Domínguez presentó su descargo por escrito y se negó a contestar preguntas del juez o del fiscal.
“Niego categóricamente todos y cada uno de los hechos que me incriminan en la presente causa, en virtud que me considero totalmente ajeno al reproche penal que se me intenta adjudicar”, dijo Domínguez en uno de los primeros párrafos del escrito, al que accedió Télam.
Explicó que el domingo 27 de febrero asistió al local bailable “Ro Tecno Bar” con su amigo Alexis Cuzzoni (19) –otro de los imputados-, que allí conoció a “la chica en cuestión y a su amigo” y que de madrugada fueron con ellos y otras personas que después se retiraron, a continuar tomando cerveza a la “plaza Soler”.
Según quedó asentado en el acta de la indagatoria, al juez Domínguez también le pidió poder continuar su tratamiento en el Hospital Muñiz donde lo tratan porque padece del virus del papiloma humano (VPH o HPV) y también por haber sufrido otra enfermedad de transmisión sexual, sífilis.
Domínguez y los otros cinco detenidos fueron procesados la semana pasada como presuntos coautores de un “abuso sexual con acceso carnal agravado por la intervención de dos o más personas” (con una pena prevista de entre 8 y 20 años de cárcel) y dos de ellos (Retondo y Domínguez) además por las «lesiones leves» provocadas a un testigo, y se les trabó embargos por 35 millones de pesos a cada uno.
Para el juez Fernández, los seis actuaron con “un plan previo, con acuerdo de voluntades y roles”, más allá de que no todos hayan participado activamente del abuso de la víctima, al que describió como un “ataque sexual masivo”.
El hecho
Ocurrió el feriado del pasado 28 de febrero, a partir de las 14.45, en Palermo Soho, donde una pareja de panaderos y otro vecino intervinieron al ver que dentro de un auto Volkswagen Gol estacionado junto a la vereda abusaban en grupo de una chica.
Mientras cuatro de los imputados -Ramos, Ciongo Pasotti, Cuzzoni y Lykan-, estuvieron dentro del auto con la víctima, los otros dos -Domínguez y Retondo-, cantaban y tocaban la guitarra en la vereda, aunque “observando y convalidando el ataque sexual”, según la resolución del juez.
Fernández sostuvo que los acusados se aprovecharon del estado de vulnerabilidad en el que se encontraba la víctima (tenía alcohol, marihuana y anfetaminas en su organismo), a partir de lo cual no estaba en condiciones de consentir ningún acto sexual.