Hay operativos más estrictos de monitoreo en el transporte público y los accesos a la Ciudad para verificar que solo viajen los trabajadores esenciales.
En el primer día de la cuarentena estricta en la zona del AMBA, hay mayores controles, sobre todo en los ingresos a Capital Federal y en el interior del conurbano bonaerense.
Los controles se reforzaron desde la madrugada. Con esta medida, se buscan “sacar de la calle a dos millones de personas”.
Los agentes de fuerzas federales y porteñas monitorean en los centros de transporte y accesos a la Ciudad que solo viajen los trabajadores de rubros considerados esenciales, los únicos habilitados para circular en la nueva etapa de la cuarentena, que durará hasta el próximo 17 de julio.
El Gobierno dispuso más de 2500 efectivos de fuerzas de seguridad federales en 241 estaciones de siete líneas de ferrocarril que conectan la Ciudad con el conurbano.
Además, en Capital Federal la Policía de Ciudad y agentes de Tránsito controlan el transporte público, los 40 accesos vehiculares, los 26 peatonales y el transporte público.
A diferencia las fases anteriores de la cuarentena, esta vez también en el interior de los municipios del conurbano bonaerense hubo controles para automóviles y transporte público.
En varios de los controles del conurbano, según consigna NA, la policía solicitaba los permisos pero sin disponer de la posibilidad de escanear los códigos QR con los que cuenta la aplicación CuidAR.
Los trabajadores esenciales, los únicos que pueden usar el transporte público, debieron haber gestionado nuevamente el permiso oficial para circular, que pueden llevar en forma impresa, digital o en la aplicación Cuidar.
Además de estas habilitaciones se podrán gestionar permisos especiales de 24 horas de duración, que solo podrán tramitarse dos veces por semana: será para padres y madres separados, trámites impostergables y urgencias, asistencia a familiares y personas que realicen tratamientos médicos prolongados.
