Miguel “Caracú” Albornoz era familiar de las víctimas del triple crimen que estremeció a la ciudad en febrero de 2020. El hombre de 74 años recibió al menos dos disparos en su pierna derecha, aunque la Policía encontró siete vainas servidas calibre 9 milímetros.
Tras las 6 muertes del lunes en Rosario por presuntos ataques sicarios, se le suma uno más en la ciudad: anoche un hombre que cumplía arresto domiciliario por narcotráfico fue baleado.
Se trata de Miguel “Caracú” Albornoz, quien recibió al menos dos disparos en su pierna derecha en su casa en el barrio de Empalme Graneros.
El hecho ocurrió ayer pasadas las 22, el mismo día que llegaron 160 nuevos agentes de las fuerzas federales a Rosario, con el objetivo de desarrollar operativos policiales y combatir los preocupantes episodios de inseguridad.
Según las fuentes policiales, un hombre con ropa oscura tocó el portón de la casa de la víctima de 74 años y la llamó por su nombre. Cuando Caracú salió a la puerta, fue baleado. Al mismo tiempo, la Policía encontró siete vainas servidas calibre 9 milímetros. Albornoz fue trasladado al hospital de urgancia, y permanece internado, aunque fuera de peligro, según detalló Clarín.
En tanto, los testigos que presenciaron el asesinato confirmaron que el atacante huyó de la escena del crimen junto a un cómplice que lo esperaba en una moto.
El hombre cumplía arresto domiciliario tras haber sido detenido en abril de 2019, acusado de ser el líder de una organización narco que se dedicaba a producir y comercializar cocaína. “No soy narcotraficante, no tomo, no fumo, no consumo marihuana”, se defendió poco después de su detención.
Caracú Albornoz era familiar del las víctimas que fueron asesinadas en el triple crimen que estremeció a Rosario a comienzos del año pasado. En febrero de 2020, su hijo Christopher Nahuel Albornoz, su nuera, Florencia Naomí Corvalán, ambos de 21 años, y su nieta, Adelain Chelsi Albornoz, que iba a cumplir dos años a fines de marzo, fueron acribillados desde una una moto que se puso a la par de la suya en Génova y Cabal.
La madre de Cristopher y expareja de “Caracú” reconoció que tiene otro hijo de 46 años, que está tras las rejas por la misma causa que involucra a su exesposo.
Por su parte, El gobernador de Santa Fe, Omar Perotti, aseguró que la seguidilla de homicidios registrada en los últimos días en Rosario es consecuencia de “haber mirado tantos años para otro lado”, lo que permitió que algunas bandas se hayan convertido en organizaciones criminales, y agregó que “hay una decisión tomada, que es cortar los vínculos con el delito”.
“Esto es lo que enfrentamos y no lo ocultamos. No barremos debajo de la alfombra. Barrer debajo de la alfombra durante tantos años llevó a que tengamos organizaciones criminales con este nivel de organización”, dijo el mandatario santafesino durante una rueda de prensa en la que expusieron detalles sobre el sistema de seguridad.