Hoy la pobreza en Argentina alcanza a más de la mitad de las niñas, niños y adolescentes de nuestro país y crece la inseguridad alimentaria en la infancia.
Hace 30 años, la Asamblea General de Naciones Unidas dio a conocer un documento que cambió la mirada respecto a los millones de niños y niñas alrededor del mundo. Ese documento, la Convención sobre los Derechos del niño (CDN) establece que toda persona hasta los 18 años de edad sea reconocida como sujeto de derecho.
Es decir, que no sean vistos como objetos de compasión sino como titulares de derechos civiles, políticos, sociales, económicos y culturales. Derechos reconocidos internacionalmente que cada Estado firmante se compromete a proteger, promover y garantizar.
Hoy la pobreza en Argentina alcanza a más de la mitad de las niñas, niños y adolescentes de nuestro país y crece la inseguridad alimentaria en la infancia. Según los datos del primer semestre de 2019 difundidos por el INDEC, el 52,6% de niñas y niños menores de 15 años son pobres y la indigencia subió de 8 a 13,1%.
En el último informe del Observatorio de la Deuda Social Argentina (UCA) se destacó que la proporción de niñas y niños en hogares que no logran cubrir las necesidades alimentarias de todos sus miembros alcanzó el 29,3% en 2018, la cifra más elevada de la década.
La Lic. Alejandra Perinetti, Directora Nacional de Aldeas Infantiles SOS Argentina explicó que aquel documento se convirtió en un hecho histórico que “permitió dimensionar al niño en presente y no sólo como el potencial ciudadano a futuro. En otras palabras, significa que las respuestas por parte del Estado deben brindarse aquí y ahora y que los niños y niñas están en condiciones de exigir al Estado todas las políticas necesarias para garantizar su desarrollo integral, el resguardo de su integridad psicofísica y que sus voces sean escuchadas”.
“Pasaron ya 30 años desde su sanción y sin embargo todavía existe una gran inequidad social respecto de la niñez, desigualdad que afecta de manera directa la posibilidad de acceder al pleno ejercicio de sus derechos”, señaló la especialista y destacó que en nuestro país la mitad de los niños vive en la pobreza y no cuentan con los recursos necesarios para garantizar su desarrollo integral.