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Un jurado popular absolvió a un hombre que intentó matar a su novia por estar drogado

Le disparó dos veces a su novia y fue declarado inimputable por haber fumado marihuana. El acusado fingió un intento de suicidio y cuando ella lo quiso ayudar, la baleó

Mediante un jurado popular, en Mar del Plata, un hombre acusado de haber intentado matar a su novia al pegarle dos disparos en la cabeza fue declarado inimputable por haber fumado marihuana.

Noel Budeguer, de 27 años, llegó al juicio detenido e imputado por el delito de “tentativa de homicidio agravado por el vínculo, por haber sido cometido en un contexto de violencia de género y por su comisión con arma fuego” contra su novia Micaela López Cesh (25) en la madrugada del 18 de enero de ese año, en la casa que compartían en el barrio Colina de Peralta Ramos de la localidad balnearia.

Luego de más de dos horas de deliberación, el jurado integrado por 12 ciudadanos no alcanzó los diez votos necesarios por lo que Budeguer, quien se encontraba alojado en la Unidad Penal 44 de Batán, logró su libertad.

Tanto el imputado como su defensa, a cargo de Patricia Stadler y Sebastián Mira, sostuvieron en el proceso que Budeguer había sufrido una presunta “psicosis crepuscular episódica” tras haber fumado marihuana, por lo que pidieron su inimputabilidad.

Según sostuvo la joven en el juicio, Budeguer la agredió después de acusarla por una infidelidad, y tras un supuesto intento de suicidio por parte de él, ella trató de asistirlo, pero su novio se incorporó, le pegó un culatazo en la ceja y luego le disparó dos veces.

El primer tiro atravesó la mano izquierda de López Cesh y le dio en la frente, sin perforar el hueso frontal, mientras que el segundo ingresó por el parietal y la bala aún está alojada en su cerebro.

El fiscal que intervino en el juicio, Alejandro Pellegrinelli, consideró por su parte durante sus alegatos, que estaba probado que el acusado tuvo la intención de asesinarla: “No tengo dudas de que tuvo la libertad absoluta de obrar como lo hizo para quitarle la vida”.

Antes de que el jurado comenzara a deliberar, el acusado le pidió perdón a la víctima: “Quiero pedir perdón porque no soy ajeno a lo que pasó. Sé que fue algo horrendo y Mica salió lastimada”.

El fallo despertó el enojo de la joven y de sus familiares, que escucharon el veredicto tras una jornada de más de diez horas de juicio, en el primer piso de los tribunales marplatenses.

 

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