Se trata de Guillermo Scarcella, quien es acusado de manejar una de las «cajas negras» durante la gestión del ex motonauta en la provincia de Buenos Aires.
El fiscal Álvaro Garganta citó a indagatoria al ex titular de Aguas Bonaerenses (ABSA) Guillermo Scarcella en una megacausa iniciada por una denuncia de la diputada Elisa Carrió.
Carrió acusó a Scioli y a su entorno cercano de haber creado un mecanismo de lavado de activos, en especial cuando el ex motonauta preparaba su campaña presidencial de 2015.
Scarcella fue procesado por negociaciones incompatibles con la función pública y citado para el próximo 10 de mayo. Garganta lo acusa de haber entregado 22 contratos irregulares por $63 millones durante su gestión al frente de ABSA.
Las contrataciones sospechadas fueron todas hechas a la empresa Desobstructora Argentina SA. La primera de ellas fue en 2009, meses después de que fuera creada la compañía sin que la misma cumpliese los requisitos del Reglamento General de Contrataciones de ABSA.
El presidente de esa firma, Pablo Damián Elías, fue a su vez socio de Scarcella en Simulcasting SA, una empresa dedicada a los juegos de azar.
«Desobstructora Argentina SA fue constituida por Elías luego de que Scarcella asumiera la presidencia de ABSA, para la incursión en una actividad completamente ajena a la que hasta allí venía desplegando, y que además exigía un costo de inversión especialmente alto, que encuentra explicación solo en la garantía de que las licitaciones le serían adjudicadas», explicó el fiscal.
Scarcella fue señalado por Carrió como uno de los recaudadores de la campaña presidencial de Scioli y la Justicia intenta determinar si estas, y otras maniobras sospechosas, fueron en pos de financiar las aspiraciones del ex gobernador.