De acuerdo a las estadísticas oficiales, en el acumulado en los primeros 9 meses hubo 47.250 casos, contra 52.416 que se habían denunciado en el mismo período de 2018.
En el acumulado enero-septiembre de este año, la cantidad de robos en la Ciudad cayó un 10%, de acuerdo a las estadísticas oficiales. En el acumulado en los primeros 9 meses, hubo 47.250 casos, contra 52.416 que se habían denunciado en el mismo período de 2018.
El número más bajo se registró en el último mes, con 4.746 hechos, un 22% menos que el año pasado. El ítem con mejores números fue el de robos de autos, con 48% menos como así también el de los motochorros: fue de 10%; de 52.416 a 47.205
A la par de la merma en los delitos, las cifras oficiales reflejan un crecimiento en la cantidad de personas arrestadas por robo. En ese rubro hubo 5.370 detenidos, 22% más que en el acumulado enero-septiembre del año pasado. Los meses que tuvieron más aprehendidos fueron marzo (660) y septiembre (650).
La medida judicial desató la polémica y puso el foco en una problemática sin solución: entre 2016 y 2018, los robos cometidos en moto en la Ciudad de Buenos Aires habían subido 10 %.
Según un informe del Ministerio de Justicia y Seguridad de la Ciudad, que publicó Clarín, en lo que va del año hubo 7.678 “robos con uso de moto”, con un promedio de uno cada 50 minutos. Fueron 144 hechos menos que en 2018.
Como en toda estadística oficial, existe un componente de “cifra negra”, denominación utilizada para los casos que no son denunciados. La mayoría son robos cometidos en la calle, donde la víctima evitar ir hasta la comisaría para dejar constancia de lo sucedido. Esa negativa está relacionada a una práctica muy extendida entre los policías: desanimar a la persona que quiere dejar constancia del delito para que eso no perjudique los registros de su seccional.
Desde el Gobierno de la Ciudad aseguran que la mejora de las estadísticas criminales tiene distintas causas. La primera apunta a la cantidad de policías en la calle y la distribución del patrullaje, determinada a través de un software que toma en cuenta los datos del mapa del delito.
Según las cifras oficiales, actualmente hay 18.600 agentes haciendo tareas de vigilancia en los barrios. “Nuestro primer desafío fue poner más policías y más tecnología aplicada a la seguridad. Tenemos un sistema que nos permite garantizar que, durante el día, no pase más de una hora sin que un patrullero recorra una esquina. A la noche, ese lapso se reduce a media hora”, señaló Diego Santilli, vicejefe de la Ciudad y responsable del área de Seguridad.
“El segundo objetivo era que todo ese trabajo se vea reflejado en las estadísticas. Este año hemos logrado que todos los delitos bajaran. Cerramos septiembre con 4.700 denuncias por robos, el número más bajo de los últimos 25 años”, agregó.
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