El ex jefe de Gobierno denunció una operación mediática para golpear a la ex presidenta con la Tragedia de Cromañón.
Aníbal Ibarra renunció a la defensa de la actual senadora y ex mandataria Cristina Fernández de Kirchner, en el marco de la causa por la firma del memorándum de entendimiento con Irán, caso que fue enviado a juicio oral este lunes por el juez federal Claudio Bonadío.
El ex jefe de Gobierno porteño explicó en un escrito difundido a través de sus redes sociales que tuvo que abandonar la responsabilidad por la «operación mediática y política para golpear a CFK utilizando la tragedia de Cromañón».
En el mismo texto denunció amenazas reiteradas a sus hijos menores e «irrupciones» en su domicilio en varias oportunidades. «He pasado agresiones a mi persona y por daños a mi domicilio en reiteradas ocasiones. Todo ello sin perjuicio de las veces que intervinieron en actividades políticas y actos de campaña, algunas en forma violenta», puntualizó.
«Todo esto a pesar de haber sido sobreseído por la Justicia de forma unánime por todos los jueces intervinientes en tres instancias», remarcó el actual legislador de la Ciudad de Buenos Aires.
Ibarra justificó su alejamiento de CFK porque «no es justo ni posible que además de defenderse ella de la persecución política y judicial a la que es sometida tenga que ocuparse también de todo esto».