La justicia del país asiático también le trabó un embargo de 17 millones de dólares.
Un tribunal de Seúl, Corea del Sur, condenó a la ex presidenta Park-Geun-hye a 24 años de cárcel por la causa de corrupción que la destituyó de su cargo el año pasado.
Park fue destituida y detenida en marzo de 2017 tras haber sido declarada culpable de corrupción, abuso de poder y coerción por el tribunal del distrito central de Seúl, que le impuso además una multa de 18.000 millones de wones (unos 17 millones de dólares).
El juez Kim-Se-yoon sostuvo que la presidenta obligó a varias empresas surcoreanas a entregar decenas de millones de wones a dos fundaciones controladas por su amiga Choi-Soon-sil.
«La acusada utilizó ilegalmente su autoridad presidencial a la demanda de Choi para obligar a las empresas a dar dinero a las fundaciones», sentenció el magistrado.
Park-Geun-hye había accedido al poder en 2013 tras haberse autodenominado en la campaña como «hija de la nación». La hija mayor del ex dictador Park-Chung-hee fue la primera mujer elegida presidente en la historia de Corea del Sur.