Organizadores esperan que miles de cubanos tomen las calles de las principales ciudades del país por la liberación de los denominados “presos políticos” y la solución de las diferencias por la vía democrática y pacífica.
Cuba enfrentará hoy un día clave por la convocatoria a la denominada marcha 15N, donde el grupo “Archipiélago”, una plataforma que, a través de las redes sociales, tiene como objetivo unir las voces de todos los cubanos, sin importar la ideología, y buscar una salida común a la grave situación que vive el país y pide la liberación de los “presos políticos”.
Pese a haber pedido permiso a las autoridades para llevar a cabo la marcha en varias ciudades y se lo denegaron, mantuvieron la convocatoria. Ayer, el líder más visible de la protesta, el dramaturgo de 39 años Yunior García Aguilera, había anunciado que marcharía en solitario por La Habana con una rosa blanca en la mano. Sin embargo no pudo salir de su casa, que fue rodeada por agentes vestidos de civil que le impidieron poner un pie fuera de su apartamento.
Desde La Habana, el presidente Díaz-Canel ha avisado que “estamos atentos, alertas y preparados para defender la Revolución” ante las crecientes marchas que están previstas en el país en las próximas horas.
Bajo ese contexto, la presencia policial se incrementó notablemente en los últimos días en las zonas más sensibles. El pasado 11 de julio hubo quejas de violencia policial y se observaron imágenes de agresiones a manifestantes y periodistas. Las protestas en todo el país se saldaron con un solo muerto. También se denunció la actuación violenta de grupos progubernamentales que atacaron a manifestantes con palos y objetos contundentes.
Las claves
*Los jóvenes: cada vez son más los que expresan públicamente (principalmente en las redes) su disconformidad con el sistema actual, pero solo una minoría está dispuesta a salir a la calle, por miedo a represalias.
* La reapertura: el 15 de noviembre, Cuba reabre sus puertas al turismo internacional, una “fiesta”, según las autoridades, quienes no quieren empañar la puesta en marcha de su segunda mayor actividad económica con la protesta.
* Miseria y escasez: el descontento social se vio afectado en el último año por el impacto de la pandemia sobre la ya atribulada economía cubana, el endurecimiento de las sanciones estadounidenses y la mala gestión macroeconómica. Los cubanos sufren desde hace meses una gran escasez, que afecta incluso a los alimentos, las medicinas y la ropa. Esto ha provocado grandes colas frente a las tiendas y una inflación desatada.
* El exilio: los cubanos en el extranjero, en su mayoría contrarios al sistema político de la isla, están elevando cada vez más su voz. Especialmente ahora que deben hacer un esfuerzo extra para alimentarlos, vestirlos y conectarlos a internet con sus divisas. Cientos de miles de cubanos emigrantes están llamados a salir a las calles desde este domingo y lunes, en más de un centenar de ciudades de todo el mundo -Miami es la principal- para solidarizarse con las marchas del 15N.
* Estados Unidos: según el Gobierno cubano, Estados Unidos es el verdadero promotor de la marcha del 15 de noviembre, porque Washington sigue buscando un cambio de régimen en la isla. Por su parte, el presidente estadounidense, Joe Biden, ha amenazado con más sanciones a Cuba si se violan derechos humanos y las libertades fundamentales de los manifestantes o si se procesa a los organizadores.