La iniciativa hace hincapié en el cuidado de las víctimas e introduce alternativas de inserción social para que los jóvenes no vuelvan a cometer delitos.
El Gobierno presentó este martes el anteproyecto del nuevo Régimen de Responsabilidad Penal Juvenil, que contempla bajar la edad de imputabilidad a 15 años. Así lo anunciaron la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, el ministro de Justicia y Derechos Humanos, Germán Garavano; y el coordinador general de la comisión Justicia 2020, Ricardo Gil Lavedra.
La reforma incluye a los delitos con penas superiores a los 15 años de prisión. “Es un tema muy importante y una cuenta pendiente de la democracia porque la ley actual es de hace 40 años, una disposición de la dictadura”, precisó Garavano.
Según el escrito, “es el resultado de más de tres años de trabajo que involucraron, a partir de la plataforma Justicia 2020, a más de 3000 expertos y civiles de todo el país”. Una comisión redactora, de la que participó Unicef, preparó las bases del anteproyecto consensuado.
Contiene más de 100 artículos, cuenta con una Justicia especializada para abordar los problemas desde una perspectiva multidisciplinaria y restaurativa; así fomentar en el niño o el adolescente el sentido de la responsabilidad por sus actos; y procurar la integración social de los jóvenes e involucrar activamente a las víctimas.
“Quizás tiene un nombre que no contempla la idea principal que es que haya menos delincuentes y no más presos. Los chicos van a tener un Estado que les va a dar una respuesta para que no sigan con la carrera delictiva”, apuntó Bullrich
Además, los jueces que intervengan en los casos deberán tener formación adecuada y tendrán que trabajar en colaboración con expertos atinentes a la problemática. “Está pensado para delitos de altísima gravedad», agregó Garavano.
El sistema de escalas que establece el Gobierno se basa en las siguientes responsabilidades penales: el adolescente es penalmente responsable desde los 15 años de edad si comete un delito cuya pena máxima posible es de quince años de prisión o más (robo con arma de fuego, violación, secuestro extorsivo, homicidio o lesiones gravísimas). Y es penalmente responsable desde los 16 y hasta los 18 años si comete un delito cuya pena máxima posible es de dos años o más.