El ministro de Justicia defendió el proyecto para bajar la edad de imputabilidad y aseguró que los menores que comentan delitos graves tendrán un tratamiento distinto.
El ministro de Justicia, Germán Garavano, defendió una vez más el proyecto de ley del oficialismo, sobre el nuevo régimen penal juvenil, que es cuestionado por la decisión de bajar a 15 años la edad de imputabilidad de los menores en delitos graves.
«Quince años es un punto de consenso y está basado fuertemente en la estadística. A partir de los 15 años, un joven comprende la criminalidad de sus actos y debe responder con un régimen especial», dijo el funcionario.
Garavano formó parte del equipo que diagramó la letra fina del proyecto, y es el responsable político de la reforma. Según sus estadísticas, a los 15 años es cuando los jóvenes comienzan a «cometer sobre todo aquellos hechos más brutales, que son los que van a hacer que a partir de esa edad uno sea penalmente responsable».
El proyecto de ley solo regirá para los delitos más graves como violaciones, homicidios, secuestros extorsivos, entre otros, que tienen penas mayores a los 15 años de prisión.