Justificó el pedido en piedrazos y una amenaza anónima por teléfono.
Julieta Silva, la mujer que atropelló y mato a su novio Genaro Fotunato, pidió a la Justicia que cambie el lugar donde cumple su prisión preventiva domiciliaria por una serie de amenazas recibidas.
Desde el entorno de la acusada argumentaron que recibieron piedrazos en la casa que comparte con su padre y que una mujer amenazó a sus hijos por teléfono. «Que no les pase lo mismo que a Genaro», dijo una voz femenina anónima.
La fiscal Andrea Rossi trabajará junto con el Servicio Penitenciario de Mendoza para hacer el estudio socio-ambiental que determine si es viable el cambio de domicilio.
Por otra parte, la Justicia espera las pericias de luminosidad sobre la calle donde fue atropellado Fortunato. El rugbier de 25 años discutió con Silva en el boliche La Mona y mientras la mujer se iba del lugar dio una vuelta en U y lo pisó.
Silva argumentó que no lo vio por la falta de luminaria. La pericia es clave para determinar la validez del testimonio de un cuidacoches, quien sostuvo que la visibilidad era perfecta y que Silva atropelló adrede a Fortunato.