Abogados querellantes reclaman encubrimiento, incumplimiento de deberes y otros delitos. Además piden tres años para y Anzorreguy.
La querella de la AMIA pidió la condena de cuatro años de prisión al ex mandatario, Carlos Menem y tres años al ex titular de la SIDE en su gobierno, Hugo Anzorreguy, por encubrimiento, incumplimiento de deberes y otros delitos durante la investigación del atentado a la AMIA, en el alegato final ante el Tribunal Oral Federal 2.
Gabriel Camiser, abogado querellante, presentó hoy su alegato en el juicio oral por el encubrimiento del atentado a la AMIA y recordó que durante la investigación del atentado, el ex presidente Menem, ordenó que se le indicara a Galeano que no avanzara sobre la pista que conducía al ciudadano sirio Jacinto Kanoore Edul (pista siria), un allegado a la entonces familia presidencial.
«La pista siria no llevó a ningún lado. No obstante, había que investigar a Kanoore Edul y no se lo hizo correctamente. Por la omisión de investigar y las irregularidades cometidas, señalamos la responsabilidad del poder político, el juez y la ex Side», explicaron desde la cuenta oficial de AMIA en la red social Twitter.
Y agregaron: «Lo dijimos en la audiencia pasada: Los elementos que se han acumulado en este juicio corroboraron que la voluntad de Carlos y Munir Menem fue instrumentada obedientemente por el ex juez Galeano. A Kanoore Edul se lo siguió investigando, y nunca se demostró que fuera una persona que tuviera que ver con el atentado contra la AMIA».
AMIA y DAIA son querellantes en la causa dado que ambas instituciones fueron víctimas directas del atentado cometido el 18 de julio de 1994, en el que murieron 86 personas y cientos resultaron heridas.
Según constató Clarín, en su alegato alegato de hoy, el abogado de la querella conjunta de las instituciones judías se dedicó específicamente a abordar el abandono de la pista siria y acusó, además de Menem y Galeano, a Anzorreguy y al ex comisario Jorge «Fino» Palacios, entre otros.