El presidente venezolano acusó a Washington de intentar derrocarlo y dio 72 horas para que la delegación norteamericana abandone Venezuela. Por su parte, Juan Guaidó desestimó la decisión e instó a “desconocer cualquier orden o disposición” del líder chavista.
Nicolás Maduro dio un discurso desde el Palacio de Miraflores luego de que el presidente de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, asumiera los cargos ejecutivos de Venezuela tras jurar en una movilización multitudinaria en Caracas. El Mandatario chavista anunció que permanecerá en el Gobierno, acusó a Estados Unidos de intentar derrocarlo y decidió romper las relaciones diplomáticas y políticas con el país norteamericano.
“He decidido romper relaciones diplomáticas y políticas con el gobierno imperialista de los Estados Unidos. ¡Fuera! Se van de Venezuela, aquí hay dignidad carajo!”, dijo Maduro, quien dio 72 horas a la delegación diplomática para abandonar el país.
“Pretenden gobernar Venezuela desde Washington”, agregó Maduro, y envió un mensaje desafiante: “Aquí no se rinde nadie, vamos al combate”. A su vez, manifestó que “los problemas nuestros se resuelven en casa. El gobierno defenderá la soberanía del país con todo el esfuerzo nacional”.
Por su parte, Guaidó desestimó la decisión del líder chavista e hizo público un comunicado en el que expresó: “A todos los jefes de misión diplomáticas y su personal acreditados en Venezuela, comunico que el Estado desea firmemente que mantengan su presencia diplomática en el país”, e instó a “desconocer cualquier orden o disposición al respecto que contradiga” lo dicho.
“Cualquier disposición contraria carecería de validez, pues emanaría de personas o entidades que, por su carácter usurpatorio, no tienen autoridad legítima para pronunciarse al respecto”, concluyó el diputado opositor que se proclamó “presidente encargado”.