En su indagatoria, Dahiana Madrid dijo que quienes acompañaban a Diego no la dejaban entrar a la habitación. Además, contó que tenía una mala relación con el astro del fútbol y que las personas que lo acompañaban no la dejaban entrar a su habitación.
La enfermera que cuidaba por la mañana a Diego Maradona y está imputada por su muerte, declaró que nunca pudo tomarle los signos vitales. El abogado de Dahiana Gisela Madrid pidió su sobreseimiento del delito de “homicidio simple con dolo eventual”.
“Habló doce horas en su vida con Maradona. Es un expediente con treinta cuerpos y vamos a pedir inmediatamente terminada la declaración el sobreseimiento de Madrid”, dijo el letrado Rodolfo Baqué.
Frente a Orlando Díaz, juez de Garantías de San Isidro y el grupo de fiscales que llevan adelante la investigación todos los médicos tratantes, la profesional contó que todas las persona del círculo que vivía en la casa, más Maradona, le prohibieron tratarlo.
“Madrid solamente le suministraba la medicación psiquiátrica, medicación que en la autopsia apareció que había digerido el paciente. Entonces acusarla por homicidio con dolo eventual, es decir, queriendo matarlo… Queremos que el juez pueda escuchar de boca de ella que esta acusación es errónea respecto de ella”, detalló Baqué.
Además de Madrid, están imputados el médico Leopoldo Luque, el psicólogo Carlos Díaz, la psiquiatra Agustina Cosachov, los coordinadores médicos de la obra social Swiss Medical (Mariano Perroni y Nancy Forlini) y el enfermero Ricardo Almirón, que inició la ronda de declaraciones el pasado lunes y se extenderá hasta el 28 de junio.
Almirón, quien estuvo hasta las 7 del 25 de noviembre, el día en el que murió Maradona en el barrio San Andrés de Tigre, complicó a la psiquiatra Cosachov y a otros médicos imputados por la muerte del Diez, al asegurar que él había dado alarmas sobre la salud del astro.
El próximo que deberá declarar es Mariano Perroni mañana sobre el mediodía. La próxima semana seguirán las indagatorias y se extenderá hasta el 25 de junio.
