La Cámara de General Roca negó que el deceso del joven se hubiera producido bajo la figura de la legítima defensa, durante la manifestación del grupo indígena de la Resistencia Ancestral Mapuche en Villa Mascardi.
La investigación sobre la muerte de Rafael Nahuel en 2017 vuelve a ser noticia tras una sorpresiva medida que dictó la Cámara Federal de General Roca, al disponer la prisión preventiva del prefecto Francisco Pintos.
Dicho tribunal desestimó el fallo del juez federal de Bariloche Leónidas Moldes, que había considerado el exceso en la legítima defensa y se cambió la imputación por la de homicidio agravado.
Los magistrados Marian Lozano, Richard Gallego y Ricardo Barreriro hicieron lugar a los planteos de los abogados de la familia de Nahuel, que en su recurso de apelación habían argumentado que el joven se hallaba desarmado y fue ejecutado por la espalda por la cuadrilla de los Albatros durante la manifestación del grupo indígena de la Resistencia Ancestral Mapuche en Villa Mascardi.
Sin embargo, la Cámara, a su vez, revocó los procesamientos a los otros cuatro miembros del Albatros, Carlos Sosa, Sergio García, Juan Obregón y Sergio Cavia y les dictó la falta de mérito. También declinó la clausura de la instrucción y ordenó que las actuaciones sean remitidas la fiscalía para que se evalúen completar otras pericias antes de que se avance hacia el juicio oral.
El caso
Rafael tenía 21 años y fue baleado por la espalda el 25 de noviembre de 2017, dos días después del desalojo de la comunidad Winkul Mapu de un predio que ocupaba en la localidad de Villa Mascardi. El joven participaba de un reclamo mapuche junto con su tía, María Nahuel, y su primera, Micaela Johana Colhuan. Según informó Prefectura, los efectivos patrullaban el lugar cuando fueron atacados por los manifestantes y ejercieron su defensa.
hubo represion. pero tiraron a marar