Se trata de Germán Castelli, que retomó hoy, de manera remota, sus actividades en el Tribunal Oral 7.
Luego de que la Corte Suprema de Justicia decidiera que el juez Castelli permanezca en su cargo en el Tribunal Oral Federal 7 porteño (TOF7) hasta tanto se dicte una sentencia definitiva, hoy el magistrado volvió a sus actividades.
La sentencia fue firmada electrónicamente luego de la acordada habitual de los jueves por Juan Carlos Maqueda, Elena Highton de Nolasco, Horacio Rosatti y Ricardo Lorenzetti, en tanto el presidente del tribunal, Carlos Rosenkrantz, votó en disidencia.
Castelli había estado de licencia hasta tanto se pronunciara la Corte, por lo que hoy volvió, aunque de manera remota. “Estoy en contacto con mi personal de la vocalía, que me está poniendo al tanto del trabajo”, contó en diálogo con serajusticia.net.
Mirá también: Córdoba: dos detenidos por el crimen de un médico
Respecto del fallo del Máximo Tribunal, Castelli consideró que la Corte “ofrece como salida a este embrollo que los jueces trasladados puedan rendir un concurso para ganarse el puesto definitivamente; esto es una salida que no resulta simple, porque si el Estado estuvo equivocado durante tantos años se generan expectativas y derechos”.
“Tiró por la borda todos estos argumentos jurídicos que se venían discutiendo para establecer lo que la Corte entiende como paradigma jurídico de los traslados que no hay traslados definitivos, que todos los traslados hechos por décadas son provisorios, que el Consejo de la Magistratura, el Senado, el Poder Ejecutivo. A lo largo de estos años estuvieron desacertados en el enfoque de creer que los traslados fueron definitivos”, planteó en declaraciones radiales.
Y remarcó que esta decisión “involucra a un montón de jueces que están trasladados, que están trabajando y que se enteran que sus cargos podrían ser cuestionados”.
