Se trata de una alumna de primaria de la Escuela Juana Ibarbourou, en Casuarinas. La Directora del establecimiento contó que la pequeña llegó sin abrigo, sin poder hablar y temblando.
Después de que una nena llegar al colegio con hipotermia en San Juan, la Dirección de la Niñez trasladó a la pequeña y sus hermanos de la extrema pobreza a un hogar, hasta que se pueda establecer con la familia que vivirán.
Según explicó Carlos Olivera, director de Niñez, adolescencia y familia, se priorizará los lazos de sangre o familiares cercanos para que se hagan cargo de ellos.
El episodio se dio en la Escuela Juan Ibarbourou, en Casuarinas, cuando la alumna de 9 años llegó al establecimiento sin abrigo, sin poder hablar y temblando. “La nena llegó y la gente de la recepción, porteros y auxiliares, vieron que no respondía, que tiritaba. Venía sin campera, con una remera manga corta, debajo del guardapolvo, con una calza de algodón y zapatillitas. De inmediato la niña fue llevada a un lugar cálido, a una pequeña cocina que tenemos en la escuela”, relató la directora, Beatriz Martínez.
Martínez contó que la niña “temblaba, lloraba, no podía expresar nada”. “Recurrimos a lo que teníamos a mano, algo de ropa para abrigarla. Luego la trasladamos a otra cocina donde estaba encendida la estufa, se le dio un te calentito de a sorbos, porque no podía sostener nada, ni la cuchara. La arropamos toda la mañana, mientras la docente estaba con ella”, agregó.
La Dirección de la Niñez advirtió el estado general clínico y médico de la pequeña, y no se los encontró mal de salud ni desnutridos. “Tenemos un servicio de ambulancia y médico y no advirtieron que estuvieran en malas condiciones, a simple vista no tiene situación de desnutrición. Hay que ver si esto es circunstancial o se dio también días previos. El grupo familiar es numeroso”, sostuvo Olivera.
Algunos de los hermanos estaban con la mamá que a su vez cuidaba a su madre en El Encon y a cargo del padrastro habían 3 chicos que son hermanos de diferentes padres y se desconoce quiénes son estos ni dónde están.
“Hay que ver la responsabilidad del padrastro para la eventual condición que fue encontrada la nena. Transitoriamente van a estar en hogares de la niñez, hasta tanto abordemos la situación familiar y nos hagamos una composición del lugar para informar al juez”, destacó Olivera subrayando que “la ley siempre pugna para que los niños estén en el ambiente familiar” y las últimas posibilidades son que quede en el hogar y por última que termine en adopción.
Por último, indicó que “hay que fortalecer para que la negligencia no vuelva a pasar” y “se debe garantizar que continúe en el núcleo familiar”, considerando que “la red familiar no se agota en papá y mamá, siempre hay un tío, abuelo, que levanta la mano y dice ‘la cuido yo y conmigo va a estar bien’”.