El juez Bonadio entiende que el empresario aceitero más importante del país tiene relación con la causa a partir de sus negocios ferroviarios.
El juez federal Claudio Bonadio citó a declaración indagatoria a Roberto Urquía, ex senador por el Frente Para la Victoria y dueño de Aceitera General Deheza (AGD), una de las empresas más importante del país.
Urquía fue señalado en la causa por la manera en que consiguió varias licitaciones de trenes durante la gestión de Ricardo Jaime al frente de la Secretaría de Transporte entre 2003 y 2009.
La empresa posee la concesión del ferrocarril de carga Nuevo Central Argentino (NCA), cuyos 4757 kilómetros de vías atraviesan las provincias de Buenos Aires, Santa Fe, Córdoba, Santiago del Estero y Tucumán.
Según detalla Infobae, La empresa NCA se asoció con Ferrovías, del Grupo Emepa y formaron la empresa Ferrocentral. Esa compañía se quedó con la explotación del tren entre Retiro y Córdoba, además del Tren de las Sierras, que comunica la capital provincial con Capilla del Monte. En ese contexto se sospecha que pudo haber pago de sobornos para ganar esas licitaciones.
Urquía fue senador por el FPV en 2003 y tenía una gran relación con Cristina Fernández de Kirchner que se rompió tras la discusión por las retenciones móviles en 2008.