El oficialismo aprobó con 41 votos a favor y 21 en contra la reforma del régimen de jubilaciones especiales de jueces, fiscales y diplomáticos. El senador nacional consideró además que “se irá viendo si esos otros beneficios se pueden modificar”.
Luego de que el Senado aprobara la reforma de jubilaciones especiales con 41 votos a favor y 21 en contra, el senador nacional Oscar Parrilli celebró su aprobación y aclaró que “todavía siguen teniendo algunos beneficios que se irá viendo si se pueden modificar”.
“No se eliminaron las jubilaciones de privilegio, sino que se recortaron algunos privilegios que tenían. Para mi gusto, creo que todavía siguen teniendo algunos beneficios que se irá viendo si se pueden modificar”, sostuvo el legislador del Frente de Todos en declaraciones radiales.
Para Parrilli, se debe poner a magistrados, funcionarios y miembros del Poder Judicial en el mismo régimen jubilatorio que la mayoría de los ciudadanos, al igual que sucede con diputados, senadores y miembros del Poder Ejecutivo.
Por otro lado, cuestionó la actitud de los legisladores opositores y recordó que primero plantearon que había que derogarlas, después que el proyecto intentaba hacer que los jueces renuncian, y por último que la ley debería ser más severa.
“Fue todo una gran mentira, una gran falacia, una gran puesta en escena a la que nos tenía acostumbrados el macrismo cuando era Gobierno y ahora lo sigue repitiendo cuando es oposición”, sostuvo.
El Senado aprobó la reforma en las jubilaciones de privilegio
El Senado de la Nación sancionó este jueves la ley de reforma de jubilaciones especiales. En la votación, en la que hubo diez senadores ausentes, 41 miembros de la Cámara Alta votaron a favor del proyecto, mientras que 21 lo hicieron en contra y no hubo abstenciones.
El objetivo de la ley, es subir de 12% a 18% los aportes de los regímenes especiales de jueces y diplomáticos, y establecer el haber jubilatorio en el 82% del promedio de los últimos 120 salarios en ambos casos, además de aumentar la edad jubilatoria a 60 años en caso de mujeres y 65 para los hombres.
Durante el debate se vivieron momentos de tensión, algunos protagonizados por Cristina Fernández de Kirchner, quien se mostró molesta por el pedido de palabra que hacían constantemente los senadores de la oposición.